MUSEO DE COPTE

Se oculta tras la imponente torre circular, vestigio de las murallas romanas, al final de un agradable jardín. El espléndido edificio que lo alberga contiene elementos arquitectónicos tomados de varios edificios coptos destinados a la destrucción. El museo posee la colección de objetos coptos más completa del mundo. Además de su entorno tan agradable, la visita al museo es una forma muy interesante de comprender el arte copto. Una sala tras otra revelan suntuosos trabajos en madera con incrustaciones de nácar y marfil, numerosos iconos, manuscritos y papiros, así como tejidos antiguos.

Las primeras piezas coptas se expusieron en la sala copta del primer museo de Boulaq. En 1907, el patriarca copto de la época ordenó inventariar los hallazgos arqueológicos coptos conservados en iglesias y monasterios. Fue en 1910 cuando se inauguraron, con la ayuda de Marco Simaika Pachá, las primeras salas de lo que hoy es el Museo de Arte Copto.

Planta baja

Sala 2. Un gran tapiz del siglo ^IV o^V, procedente de Antinoe, en el Egipto Medio, con escenas festivas, a las que los coptos también estaban acostumbrados en tejidos de lino bordados con lana. Friso de piedra caliza del monasterio de San Jeremías de Saqqara, con motivos decorativos florales y animales de inspiración romana. Friso pintado con cuatro santos nimbados.

Sala 3. Los elementos esculpidos de esta sala ilustran perfectamente las influencias helenísticas del siglo ^IV en el arte copto. Capitel de piedra caliza ennegrecida, que representa a un hombre parecido al dios Dioniso, bebiendo vino. Notable busto de Afrodita con amplio collar y cabellera alborotada. Hércules y el león de Nemea. Nicho en forma de concha rodeado de un friso helenístico. Apolo y su lira. Orfeo domando a un león. El dios Pan, reconocible por sus patas de animal. Orfeo y Eurídice. Y lo más divertido, una cruz sostenida por dos Eros desnudos.

Sala 4. Los elementos presentados en esta sala ponen de relieve las influencias de las antiguas creencias egipcias en el nuevo arte cristiano. Estela funeraria de Petros, que representa una barca. Estela funeraria decorada con una cruz y un águila, a la vez motivo cristiano de resurrección y símbolo egipcio. Pila bautismal tallada en un capitel antiguo, realzada con decoraciones de cestas tejidas y cruces.

Salas 5 a 6 y patio interior. Arte cristiano en los monasterios del desierto. Nicho pintado que representa a Cristo en majestad, rodeado de ángeles sonrientes. Otro nicho con una pintura de Cristo en Majestad. Jarras de cerámica decoradas con peces, un símbolo cuyo acróstico en griego, ΙΧΘΥΣ, puede significar "Jesucristo, Dios Hijo, Salvador". El patio interior contiene varios capiteles procedentes del monasterio de San Jeremías de Saqqara.

Salas 7 a 9. Piezas procedentes del monasterio de San Pablo de Bawit. Un techo abovedado representa a San Apolo, o Pablo, fundador del monasterio, rodeado de sus monjes Phib y Anoup. En la sala 8, un espléndido conjunto de un nicho pintado reconstruido, que muestra a la Virgen María con su hijo en brazos y, en la bóveda, a Cristo en majestad rodeado de los signos de los cuatro evangelistas y ángeles adoradores. Otro fresco representa el busto de Cristo, con rasgos particularmente egipcios. En la sala 9, un inesperado fresco de ratones que sostienen flores en sus patas y piden la paz a un gato dispuesto a atacar, conocido como el "gato de la ciudad de Buto" (en el Delta).

Primera planta

Sala 10. Espléndido escudo de bronce, siglo ^III o ^IV, que representa un águila, de inspiración romana, hallado en las ruinas de Babilonia. Serie de bajorrelieves de piedra caliza que representan la cosecha. Friso de piedra caliza con tres animales bajo hojas de acanto; dos leones persiguen a un antílope doméstico.

Sala 11. Piezas que evocan episodios de la Biblia. Fresco rojo de Nubia, procedente de la iglesia de Abdallah Nirqi, que representa la Natividad. Magnífica peineta de marfil que representa, por un lado, ángeles rodeando a un guerrero y, por otro, la resurrección de Lázaro rodeado de vendas de momia. Friso pintado procedente del monasterio de Tebtunis, en Fayoum, que representa a Adán y Eva, desnudos y ocultando sus genitales tras el episodio del pecado original.

Salas 12 a 14. Una espléndida colección de tejidos coptos. Las túnicas son generalmente de lino, mientras que los elementos decorativos son de lana. Las representaciones humanas fueron prohibidas por la jerarquía copta ya en el siglo ^IV, pero la práctica continuó hasta la invasión árabe. Algunas telas se confeccionaban con el único fin de vestir a los difuntos. Las decoraciones son muy figurativas y simbólicas.

Sala 15. Biblioteca de Nag Hammadi. Colección de trece códices en una vasija hallada en 1945 por un camellero. La mayoría de las obras datan de la segunda mitad del siglo ^IV. Los códices sustituyeron a los antiguos pergaminos y sus hojas son de papiro y pergamino, conservadas planas en estuches de cuero.

Salas 16 y 17. Colección de libros. Los Evangelios, manuscrito iluminado procedente de Damasco en 1340, en árabe. Leccionario de Semana Santa, manuscrito iluminado realizado en Egipto en 1342. Sala 17, salterio en pergamino ^{del siglo IV}, procedente de El-Mudil.

Galería. Colección de elementos decorativos procedentes de las celdas de los monjes del desierto. Pintados con la técnica del temple, una textura a base de yema de huevo destinada a impregnar el yeso y la madera enlucida. Cruz roja estilizada de Qusur el-Rubayat, siglo ^VII. Plato de cerámica decorado con peces, hallado en una celda de Qusur el-Hegella, siglo ^VI.

Sala 18. Escenas nilóticas. Frisos de madera con postes del Nilo y cocodrilos. Bóveda de piedra caliza con patos, papiros estilizados y hombres en barcas. Busto de piedra caliza del Nilo, siglo ^III o ^IV, en forma de hombre barbado rodeado de flores de loto.

Sala 19. Objetos de madera. Panel que representa a un león atacando a un antílope, procedente de Afrodópolis. Juguetes de madera del siglo VI que representan caballos. Peines estilizados de época bizantina.

Salas 20 a 22. Colección de iconos. En las iglesias coptas no hay estatuas, sino iconos pintados sobre madera con la misma técnica del temple. Tríptico de Semana Santa, siglo ^XIII, que representa la crucifixión de Cristo en el centro, tres escenas de la entrada en Jerusalén, el lavatorio de los pies y la Última Cena a la izquierda, y el descendimiento de la cruz, el entierro y la resurrección a la derecha. Icono de los santos Antonio y Pablo de Tebas, procedente del monasterio de Mercure: un cuervo lleva pan a san Antonio, que se muere de hambre, y dos leones aparecen a la muerte de san Pablo de Tebas. Icono de la huida a Egipto de la Sagrada Familia, cuya presencia ha generado una serie de veneraciones en numerosas localidades del país.

Sala 23. Objetos de metal. Plato bíblico de plata, siglo ^XIII, que representa a la Virgen nimbada llevando a su hijo en brazos; la escritura está en árabe. Lámparas de aceite colgantes de bronce de época bizantina, con forma de paloma y ave. Una serie de llaves de bronce y hierro del monasterio blanco de Sohag.

Salas 24 y 25. Alfarería y cerámica. Destaca un frasco de Santa Menas, o Mina, procedente del monasterio del mismo nombre en la parte oeste de Alejandría. Miles de estos frascos de terracota fueron traídos por los peregrinos desde este lugar sagrado.

Sala 26. Palanquín otomano de madera, marfil, hueso y nácar. Las dimensiones de este palanquín son impresionantes: 1,95 m de largo x 1,12 m de alto x 1,05 m de ancho. Perteneció a una rica dama cristiana, que encargó este objeto decorado con motivos cristianos.

Planta baja

Tres salas con objetos decorativos procedentes de las iglesias del Viejo Cairo. Un altar de pino^{del siglo V} procedente de la iglesia de los santos Sergio y Baco. Elementos tallados de una puerta de sicomoro (la higuera egipcia) de la iglesia de Santa Bárbara. Un estuche bíblico ^{del siglo} XV de madera, plata, chapas de oro y vidrios de colores de la iglesia de la Virgen María.