DALI BOU LA GLACE

Si hay un lugar bien conocido por los lugareños y los veraneantes que buscan un refresco, es el puesto de helados de Ali Kenniche. Lleva trabajando con helados desde 1958 y, poco a poco, se ha convertido en Dali Bou la Glace. Abarrotado los fines de semana y durante todo el verano por su créponné -un sorbete de limón, especialidad del pied-noir- y su garantita -otra especialidad argelina, una especie de flan de garbanzos que se come principalmente caliente-, y que compite con los mejores de Orán, este tentempié es ideal para los que tienen un poco de hambre en el centro de la ciudad.