Bruselas, una historia belga
A través de varias obras, los directores belgas se empeñan en presentarnos una Bruselas de carácter fuerte. En 1972, la directora bruselense Chantal Akerman pintó una capital oscura y dura en su películaJeanne Dielman, 23, quai du Commerce, 1080 Bruselas. La película muestra la vida cotidiana de una mujer de Bruselas que, tras la muerte de su marido, tiene que prostituirse para mantener a su hijo. La película de Akerman es la obra maestra de su carrera y una inspiración para directores de renombre como Gus Van Sant y Michael Haneke. Un año más tarde, Benoît Lamy dirigió Home Sweet Home y dio a Bélgica algunos de sus primeros premios internacionales, como el de mejor película en el Festival de Cine de Montreal y el Premio Especial del Jurado en Moscú. Entre los famosos cineastas bruselenses se encuentra Jaco Van Dormael, nacido en 1957 en la comuna de Ixelles. Tras el triunfo de Toto le héros (rodada en parte en la Cité du Logis de Watermael-Boisfort), Van Dormael visitó la capital belga por segunda vez en 1996 para rodar su largometraje El octavo día. Esta sensible obra retrata el encuentro entre Harry (Daniel Auteuil), un adicto al trabajo, y Georges (el belga Pascal Duquenne), un joven con síndrome de Down. En otro registro, Olivier Van Hoofstadt lanzó en 2006 Dikkenek , una obra en la tradición de C'est arrivé près de chez vous (1992). Esta comedia, que se ha convertido en una película de culto en Bélgica, está ambientada en Bruselas y cuenta con un gran número de actores conocidos: Marion Cotillard, François Damiens, Mélanie Laurent, Catherine Jacob, Jean-Luc Couchard, Dominique Pinon, etc. Al igual que C'est arrivé près de chez vous, Dikkenek dividió a la crítica, pasando de "tonto y perverso" a obra maestra del humor en una fracción de segundo. En 2008, la trama de la película JCVD (de Mabrouk El Mechri, una coproducción franco-belga-luxemburguesa) se desarrolla en el municipio de Schaerbeek y gira en torno a una figura emblemática belga, el famoso Jean-Claude Van Damme. En 2009, el director bruselense Nabil Ben Yadir se dio a conocer con Les Barons. Rodada en varios barrios de la capital belga (Molenbeek, Saint-Gilles, Forest...), esta comedia sigue la vida cotidiana de cuatro amigos desempleados, expertos en travesuras, que se presentan como los barones del barrio. En 2014, el cineasta Erik Van Looy dirigió el muy americano thriller Vértigo. Ese mismo año, Dios también se instala en Bruselas en la película de Jaco Van Dormael The Brand New Testament (2014). Poelvoorde interpreta a un Dios feo, sucio y malvado cuyo trabajo se pone patas arriba por la decisión de su hija de filtrar la fecha y la hora de la muerte de cada persona en la Tierra. El pequeño Ea se pone entonces a buscar seis nuevos apóstoles para escribir el "flamante testamento". Black , de Adil El Arbi y Bilall Fallah (adaptación de dos novelas del escritor flamenco Dirk Bracke), muestra una Bruselas oscura y violenta, la de las bandas urbanas. Esta película tan dura les abrirá las puertas de Hollywood a los dos directores
Eventos e instituciones
En 1938, Bruselas adquirió un importante activo cinematográfico: la Real Filmoteca Belga (Koninklijk Belgisch Filmarchief en neerlandés). Fundada por el cineasta Henri Storck, el periodista André Thirifays y el político Pierre Vermeyien, el objetivo de esta institución es seleccionar y conservar una colección de películas cuya particularidad es tener un aspecto histórico, estético o técnico que trasciende el tiempo. Es decir, obras que podrían calificarse de "culto". La Cinemateca también recoge una amplia documentación relacionada con el mundo del séptimo arte. Más conocido como Cinematek
, también organiza proyecciones de las obras almacenadas, para deleite de los cinéfilos belgas e internacionales. En cuanto a los eventos, Bruselas acoge cada año numerosos festivales que rinden homenaje al cine belga en todas sus formas, empezando por el más famoso de todos: los Premios Cinematográficos Magritte (llamados así por el famoso pintor belga René Magritte), el equivalente a los César en Francia. Que conste que, desde 2012, una extraña y autoproclamada Académie des Machins premia "con toda parcialidad y con la peor fe" a los hombres que están detrás de las cámaras del cine belga, los técnicos. Así, en vísperas de la ceremonia de Magritte, todo el pequeño mundo del cine belga se reúne de buen humor para tener quizás la oportunidad de ganar un Moule d'or... un premio que refleja el humor belga. Otros festivales son el BIFFF (Festival Internacional de Cine Fantástico de Bruselas), el Festival de Cine de Bruselas y el BSFF (Festival de Cortometrajes de Bruselas). Bruselas también alberga el renombrado Instituto Nacional Superior de Artes del Espectáculo (INSAS), que forma a nuevos técnicos para la industria cinematográfica. Benoît Poelvoorde y Rémy Belvaux se graduaron en este instituto y realizaron C'est arrivé près de chez vous como parte de su proyecto de graduación.Internacional
En Bélgica, existe una excepción fiscal iniciada por el gobierno federal cuyo objetivo es fomentar el desarrollo del sector audiovisual en el país. Anima a las empresas a invertir en el sector audiovisual a cambio de una atractiva exención fiscal. Como el Refugio Fiscal está disponible para todas las empresas belgas o las sucursales belgas de una empresa extranjera, aumenta considerablemente el desarrollo de la industria cinematográfica en el país llano. En este contexto, muchos rodajes internacionales llegan a Bélgica y a la capital. Entre las más famosas están Chez Gino (2011, de Samuel Benchetrit) cuya trama se desarrolla íntegramente en Bruselas, Boule et Bill (2012) de Alexandre Charlot y Franck Magnier, El arte de huir (2012) de Stephen McCauley, De rouille et d'os (2012) de Jacques Audiard, con Marion Cotillard y el belga Matthias Schoenaerts, L'Écume des jours (2013) de Michel Gondry, Supercondriaque (2014) de Dany Boon y La chica danesa (2015) de Tom Hooper (también protagonizada por Matthias Schoenarts), que nos ofrece magníficas tomas del Parque Real de Bruselas así como del café À la mort subite. En 2018, el impresionante Kursk del famoso danés Thomas Vinterberg pasa por el Excelsior de la plaza Cardinal Mercier, en la comuna de Jette. Más recientemente, Brian de Palma pasó por varias ciudades belgas, entre ellas Bruselas, para su película Domino: La guerra silenciosa (2019, con Nikolaj Coster-Waldau, Guy Pearce y Carice van Houten).
