LA CUCCINA

En la Promenade Royale, los restaurantes van y vienen con un rasgo común: la falta de encanto... excepto aquí, afortunadamente, en La Cuccina. La larga barra de madera y las mesitas con velas frente al mar le dan un cierto caché para una velada acogedora a la luz de la luna. El menú es decididamente italiano, nada del otro mundo, pero una buena manera de comer en un bonito entorno. Pastas, risottos, pescados, antipasti... ¡acompañados de una buena botella de vino italiano, por favor!