CANTINA LA POTOSINA
No hay arrogancia en este bar de neón, apodado "La cueva del Potro", en referencia a los Potros de Hierro, que se refieren a los jugadores del club de fútbol Atlante FC, originario de la Ciudad de México, pero cuya franquicia se ha mudado hace tiempo a Cancún. Los tiempos están cambiando, pero no esta sala de luces de neón para despertar a los muertos. Se dice que el lugar no ha cambiado de nombre desde finales del siglo XIX (el cuarto más antiguo del centro histórico), y que sus bebedores han sido tan variados como Emiliano Zapata, Che Guevara, José Guadalupe Posada, María Rojo y Fidel Castro. En la puerta, la Santa Muerte da la bienvenida a los clientes mientras que un muñeco esqueleto sentado en el bar se asegura de que los feligreses vacíen sus vasos alegremente. A los clientes les gusta venir a jugar al dominó. Popular y amigable como siempre.