MERCADO DE LAS BRUJAS
Mercado en un antiguo barrio indígena de La Paz con plantas medicinales, talismanes, amuletos, artesanía
El famoso Mercado de las Brujas se encuentra en uno de los barrios indígenas más antiguos de La Paz. Se vende un poco de todo: plantas medicinales, talismanes, amuletos, cremas curativas, alcohol de coca, fetos de llama y otras cosas. Los aficionados discutirán sobre la buena suerte y las perspectivas del fin del mundo con los chamanes locales (llamados aquí kallawayas, amautas, chifleras y yatiris). Por supuesto, el turista más tradicional puede encontrar artesanía, textiles y joyas. Alrededor del 70% de los consumidores son residentes de La Paz y yatiris que compran productos a granel, mientras que el 30% restante son visitantes extranjeros. En agosto, durante el mes en que se celebra la Pachamama, se pueden observar las interminables colas de paceños que esperan su turno para hablar con un brujo y comprar una Q'uwa Misa, una ofrenda ritual de .
Historia
En los años 60, estaba prohibido que los bolivianos practicaran la medicina tradicional. Los kallawayas (etnia del norte de La Paz, considerados los maestros de la medicina tradicional), los amautas (filósofos y astrólogos de Tiwanaku, adivinos de la hoja de coca), las chifleras (mujeres de origen aymara que se dedican a la venta de remedios naturales) y los yatiris (chamanes que preparan ofrendas y ceremonias para la Pachamama) se convirtieron en comerciantes. ¿Adivinas dónde se instalaron? Estos nuevos vendedores se instalan en los alrededores de la iglesia de San Francisco Luego, en 2009, la Constitución Política del Estado Plurinacional de Bolivia reconoció finalmente los derechos de autodeterminación cultural, lingüística, política, territorial y religiosa de los pueblos indígenas. Al amparo de este reconocimiento, en 2013 se promulgó la Ley 459 de Medicina Tradicional Ancestral de Bolivia. Esta ley garantiza el ejercicio libre y legal de las prácticas terapéuticas indígenas al incorporarlas al sistema nacional de salud. A partir de entonces, los "médicos brujos" pudieron promover sus virtudes adivinatorias por todo el país.
Origen del nombre
El nombre tiene su origen en una estrategia de marketing turístico de los años 60 para ofrecer una imagen exótica de mujeres que venden amuletos, hierbas y productos de brujería. Se dice que Darío Morgan Ora-Mayo, fundador de la primera agencia de turismo en Bolivia en 1958, le dio este nombre.