La Grand-mère (abuela) puede hacer de todo: para empezar, acogernos en su casa del Vieux Lyon, en el corazón de este barrio declarado Patrimonio de la Humanidad. Un pequeño carrito de flores da un poco de frescura a los adoquines de la Rue du Boeuf, a un paso de la plaza Neuve, invadida de terrazas que sería mejor evitar (en su mayor parte) para ir directamente a la Grand-Mère. Le reciben a pie de calle unas personas muy atentas que le invitan a bajar una planta para descubrir unas salas soberbias, mucho más auténticas que la terraza de un bouchon. Una serie de comedores instalados en una encantadora bodega abovedada del siglo XV, con aire acondicionado natural, permite que la gente o grupos que buscan un espacio tranquilo o de reunión reciban el mejor trato. Una exitosa combinación de piedras antiguas y muebles contemporáneos que crean un ambiente cálido. El servicio es amable y muy profesional a la hora de servir unos platos totalmente caseros, una sabrosa cocina tradicional elaborada con buenos productos. La carta, reducida deliberadamente para garantizar la calidad, ofrece tanto especialidades lionesas como sus deliciosos platos: una ensalada lionesa en dos tamaños, según su apetito; huevo en cocotte a la meurette; hojaldre de caracoles con perejil; una sopa de cebolla imprescindible; la famosa tarta de hígado de la abuela, y un fuagrás de pato semicocido con crema de champiñones y trufas. Además, sirven salchicha entera para compartir durante el aperitivo. A continuación, una auténtica ternera charolesa de Borgoña, una cabeza de ternera (de los mataderos de Corbas) con salsa gribiche, riñón de ternera con crema, raviolis o aleta de raya en mantequilla con alcaparras. Otras especialidades caseras son los raviolis. Para terminar, las delicias locales, como cervelle de canut y pastel de praliné. Cuenta con una buena carta de vinos, especialmente del Beaujolais y del valle del Ródano. Grand-Mère es una apuesta segura para disfrutar de lo mejor de Lyon.
The eating space is very tight but expected for a traditional eatery like this.
Les plats sont simples, généreux, tout simplement excellents, on s'attendait à une cuisine "réconfortante " et cest exactement ce que nous avons eu. Merci!
Assez bien dans l ensemble.
Le cadre est agréable, de grandes tables au centre de la pièce où on mange en compagnie d autres personnes, c est assez sympa.