Muy modestamente, y porque el inmenso Georges Blanc tiene sentido común, parece que el líder de Vonnas ha ido a nuestra dirección frenando el aumento de estas tarifas y al "reagruparse" en otros platos que en la carne. Aunque la carta nos propone siempre un Burger Gourmand en el condado (pan artesanal y carne francesa de calidad), a pesar de todo 21 euros. La decoración es el mismo y es bastante lograda, evitando hacer de este restaurante un tópico del género con sus inscripciones pertinentes. La cocina está a la altura de lo que se puede esperar de una casa de este chef multiestrellado. La carta todavía tiene piezas que no encontraremos en ningún otro lugar, carne seleccionada con un cuidado especial como el Tomahawk de ternera Black Angus (94 euros por 2 pers.) o una charca de buey japonés Wagyu a 38 euros los 180 g. Todas las carnes son excepcionales y las salsas son casas. Pero también nos gusta mirar hacia el pastel con corteza casera castilla de foie gras, gambas "King Prawns XL" en Tempura, una "nueva" langosta de Tristan da Cunha cocida a la plancha o un bonito lenguado de la época, sin olvidar otra pluma Duroc de Batallé, así como un supremo de aves de corral con tandoori. Buena reacción de un Centro que no debe dejarse arrastrar. La lista sigue el caso con atención.
Je recommande.
Concernant le service à revoir, quand il commence à être 23h et qu’il y a du monde plus personne vient prendre les commandes
De la bonne musique mais aucune ambiance, clairement on peut trouver bien mieux ailleurs pour le prix