gravelot en train de se nourrir, dans la réserve naturelle des Orpellières, à Sérignan-Plage © Maixent Collado:Agglo Béziers Méditerranée .jpg

Las dunas

El Domaine des Orpellières es una reserva natural de extraordinaria biodiversidad. Protegido en el marco de "Natura 2000", el lugar, que se extiende por 167,76 ha, está constituido sobre todo por un cinturón de dunas de 2,5 km de longitud. Las dunas de Orpellières, que se encuentran en un estado de conservación excepcional, se forman a partir de la playa por el mar (acumulación de restos naturales por el mar), transportados por las olas durante los temporales. Esta acumulación de materia orgánica favorece el desarrollo de plantas como la euphorbia peplis, el panicaut marítimo o el oyat, una planta típica de las dunas cuyas raíces trazadoras aseguran el mantenimiento de la playa de barrera. En este entorno dunar se pueden encontrar reptiles como el psammodromus de Edwards, caracoles, las famosas caragüillas de las dunas y muchas especies de abejas.

La laguna

Este espacio entre la tierra y el mar puede verse en Les Orpellières. En esta red de pequeñas lagunas, algunas están en el agua todo el año, otras sólo en invierno. Estos entornos únicos se alimentan de agua dulce y agua de mar (a través de la inmersión marina). Durante las tormentas, se forma un canal en la playa que une la laguna con el mar: el grau permite el movimiento de los peces migratorios de un medio a otro, como los salmonetes y las anguilas. No es raro observar aquí muchas aves: garza real, garceta, flamenco rosa, charrán y el pájaro emblemático de las Orpellières, el chorlito gris.

Praderas de sal

Esta vasta zona de humedales situada detrás del cinturón de dunas presenta ambientes contrastados en los que la biodiversidad es la reina. En este sansouire, la hierba de cristal es la planta emblemática. Está muy presente en los suelos ricos en sales marinas y le gustan especialmente estas marismas. La vidriera es también una planta comestible, que se consume con frecuencia en forma de ensalada. En estas praderas halófilas, ("amantes de la sal"), encontramos la saladelle, también llamada lavanda de mar por sus flores moradas agrupadas en espigas.

El Orbe

El Orb es un río costero que atraviesa la llanura del Biterrois, y es especialmente atractivo por su fauna y flora, sobre todo en su desembocadura, situada en la Pointe des Orpellières. Un entorno rico en biodiversidad, que alberga anguilas y sábalos, unos peces marinos que nadan por el curso inferior del río. Las orillas del Orbe son especialmente populares entre las aves que excavan allí sus nidos, como el martín pescador o el abejaruco europeo.

Garriga, vid y especies mediterráneas

Más allá del litoral, el Biterrois desarrolla sus llanuras y colinas en un entorno característico del cordón mediterráneo. Aprovechando la diversidad de los suelos, las vides se extienden con vehemencia y disfrutan de la compañía de rosales protectores. Los almendros y las higueras parecen crecer sin la ayuda del hombre, y los olivos puntúan las faïsses con su follaje plateado. Las encinas y los pinos marítimos bendicen la tierra con su sombra benéfica, y las plantas aromáticas difunden sus perfumes en la garriga.