Guía de viaje Aragon

Situado en pleno corazón del Cabardès y al noroeste de Carcasona, Aragon es un pequeño y atípico pueblo fortificado de 450 habitantes construido sobre un promontorio rocoso en las estribaciones de la Montaña Negra, y en la confluencia de dos hermosos valles. Alzado en un anfiteatro, está formado por el antiguo pueblo y el barrio de Capitelles, que debe su nombre a las pequeñas cabañas de piedra características de la región. Sus callejuelas le conducirán a la iglesia gótica de Sainte-Marie, cuyo entramado fascina por sus representaciones medievales y su escudo de armas del siglo XIV, o al museo dedicado a las técnicas de los edificios antiguos. Luego puede caminar hasta el jardín del párroco con sus estelas discoidales, o hasta a la fachada del antiguo castillo señorial. Testigo de la época galo-romana, existe también una cueva sepulcral, además de un fragmento de inscripción funeraria en latín descubierto en 1820, restos que datan de 2000 años a. C. Esto explicaría el nombre del pueblo, que, aunque Aragon se vincula con el del territorio español, se piensa que en greco-celta significaría «cerca de un lugar de combate». Este pueblo está jalonado de una riquísima historia, ya que la familia de Aragon, adherida a la causa cátara, fue despojada de todas sus propiedades, pasando el pueblo al dominio real. La etiqueta «Notre village, terre d'avenir» («Nuestro pueblo, tierra de futuro»), obtenida en 2007, es la culminación de las acciones en favor del desarrollo sostenible puestas en marcha para la mejora de las viviendas y las condiciones de vida en Aragon.