Dirección parisina que prepara especialidades marroquíes, varios tajines, cuscús y postres gourmet.
La distribución total en un entorno típicamente oriental donde la madera, las paredes ocre, los mosaicos y las cerámicas dan el tono. En cuanto a la cocina, es la ocasión de descubrir las especialidades marroquíes como la pastilla al pollo (en la paloma por encargo), el cuscús, el maltrato, las diferentes tajines, todo ello con un poco de pan preparado todos los días por el chef. En postre, terminarás con pastel de almendras, ensalada de naranjas con flor de ornamentación y canela, sin olvidar el goloso y perfumado té con menta y los piñones de pino, ideal para terminar el viaje de belleza. Cuenta con 120 cubiertos y es el lugar ideal para organizar fiestas privadas. Una sala intimista muy agradable.