shutterstock_1017183019.jpg
iStock-969723252.jpg

Parques nacionales

El país cuenta con numerosas zonas protegidas destinadas a proteger el medio ambiente y a acoger y sensibilizar al público. Estos incluyen

Parque Nacional de Boukornine: situado cerca de la capital, alberga notables ecosistemas de montaña. Hay más de 200 especies de flora. El parque también cuenta con una gran diversidad de fauna.

El Parque Nacional de Ichkeul: situado en el norte del país, es una auténtica reserva de biodiversidad. Clasificada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO como reserva del Hombre y la Biosfera, es el hogar de muchas aves migratorias en torno al lago Ichkeul. Amenazada durante un tiempo por el aumento de la salinidad vinculado a las extracciones de agua de los ríos situados aguas arriba, se puso en marcha un plan de emergencia bajo los auspicios de la UNESCO, que finalizó en 2006.

Parque Nacional de Chaambi: situado al oeste del país, alberga el pico más alto del país y también una biodiversidad excepcional. Clasificada también como Reserva de la Biosfera por la UNESCO, deleitará al visitante con la belleza y diversidad de sus entornos.

Parque Nacional de Bouhedma: situado en el centro del país, en una zona de transición entre el Sáhara y el Mediterráneo, protege una gran variedad de entornos, sobre todo ecosistemas de montaña (Atlas) y estepas boscosas.

Parque Nacional de Jbil: es el mayor parque nacional de Túnez, en el sur del país, y conserva ecosistemas característicos del Sáhara. También alberga yacimientos arqueológicos.

Parque Nacional de Jebel Chitana - Cap Negro: protege una notable biodiversidad de flora y fauna, incluyendo especies endémicas. Las actividades de mediación permiten a los visitantes conocer las prácticas agrícolas y descubrir los conocimientos tradicionales relacionados con las plantas.

El Parque Nacional de Zembra y Zembretta: situado en el Golfo de Túnez, alberga las islas del archipiélago homónimo. Reserva de la biosfera de la UNESCO, protege los hábitats de especies florales endémicas, así como la avifauna en peligro de extinción (pardela mediterránea). Ofrece magníficos paseos.

El problema generalizado de los residuos

La recogida, el tratamiento y el reciclaje de residuos son todavía insuficientes en Túnez. Prueba de ello es la incapacidad de las infraestructuras para tratar los residuos domésticos, que terminan su vida en vertederos a cielo abierto, situación que provoca importantes problemas medioambientales y sanitarios. En 2019, el vertedero de Borj Chakir se incendiará. En 2020, otro escándalo salpica al ministro de Medio Ambiente, que es destituido tras las sospechas de corrupción, en un caso relacionado con la importación ilegal de residuos desde Italia. El asunto fue revelado por un medio de comunicación en noviembre de 2020, antes de que los tribunales se hicieran cargo de él. ¿El objeto del delito? Contenedores que habían llegado al puerto de Susa unos meses antes: oficialmente residuos de plástico destinados a ser reciclados en un centro de reciclaje del país. De hecho, eran residuos similares a los domésticos y a los "residuos hospitalarios". Un informe de Interpol de 2020 también destaca el aumento de los flujos ilegales de residuos de plástico desde 2018 (vinculado a la prohibición de importación de este tipo de residuos por parte de China).

Los retos de la agricultura

El modelo agrícola tunecino (principalmente para la exportación) se basa en la explotación y el uso del fosfato, que se utiliza debido a la pobreza del suelo. Sin embargo, la extracción y el procesamiento de fosfatos son muy contaminantes y consumen mucha energía. Contribuyen a la contaminación crónica del medio ambiente y se sospecha que tienen graves consecuencias para la salud. El riego agrícola es la principal fuente de consumo de agua en un país muy sometido al estrés hídrico y con redes con fugas. El bombeo excesivo del recurso en determinadas zonas ha contribuido a que el consumo de agua no sea apto para el consumo humano por la salinización. Ante estas observaciones, se han iniciado acciones. Existen plantas desalinizadoras, pero tienen el inconveniente de que consumen energía y son contaminantes. Otra solución consiste en reinyectar el agua tratada de las plantas de tratamiento de aguas residuales en la capa freática. El proyecto " Reverdir la Tunisie " desarrolla otro modelo agrícola, basado en el desarrollo de procesos ecológicos e inspirado en la permacultura. Iniciado en 2013 por el Instituto Superior de Ciencias Biológicas Aplicadas de Túnez y las ONG, ha permitido la creación de varios "oasis forestales".

Preservar el Mediterráneo

El Mediterráneo, que es una salida para los efluentes domésticos, agrícolas e industriales, sufre múltiples formas de contaminación. El estado ruinoso o insuficiente de algunas plantas de tratamiento de aguas residuales agrava aún más esta contaminación. La industria textil, muy presente en Túnez, contribuye a esta contaminación (además de ser un gran consumidor de agua).

Hacer frente al cambio climático

Túnez es uno de los países mediterráneos más vulnerables al cambio climático. Podría agravar los fenómenos de erosión costera, el estrés hídrico y aumentar la frecuencia e intensidad de los fenómenos extremos (sequías, inundaciones). Supone una amenaza de desertización. Túnez ha ratificado los Acuerdos de París y se ha comprometido así a lograr la neutralidad de carbono para 2050, con un objetivo de producción de energía renovable del 30% para 2030. Estos objetivos están a la altura del desafío climático, pero son considerados inalcanzables por las ONG.

Los retos del turismo

El turismo está vinculado a todos los problemas medioambientales del país. Ejerce presión sobre los recursos y el medio ambiente (artificialización del suelo, contaminación ligada a los residuos) y genera emisiones de gases de efecto invernadero (transporte). También está amenazada por el cambio climático (riesgo de inmersión de la costa, pérdida de biodiversidad y escasez de recursos). Sin embargo, es posible actuar fomentando la movilidad suave, un enfoque de residuos cero y la compra responsable, todo ello válido no sólo durante el viaje, sino también en las actividades diarias. Existen muchas herramientas para guiarte en esta búsqueda (Ademe, WWF, guías de residuos cero).