Los mejores restaurantes Etiopía

Un excelente restaurante francés aclamado por su cocina de calidad. Tartar de ternera, pechuga de pato, quiches de cebolla, quesos, suflé de chocolate y vino de Burdeos, los grandes clásicos de la gastronomía francesa se hallan bien representados. También ofrecen buenos desayunos. Elegante entorno (amplia villa con jardín), mesas al aire libre y jefe muy cordial. Servicio atento. Hay que moderarse, ya que la cuenta sube con mucha rapidez.

Uno de los clásicos de Adís Abeba para salir a cenar al estilo tradicional etíope y descubrir los cantos, bailes y trajes de las diferentes regiones que desfilan por el pequeño escenario de este local. La comida está bien sin ser extraordinaria (es mejor en Yod), las mesas bajas ofrecen un ambiente distendido y el show es agradable. Suele haber muchos grupos de turistas.

Es un lugar famoso por su comida etíope y por dar a conocer las danzas tradicionales del país, que animan las tardes. La gran sala es acogedora y está decorada con gusto: en el menú se encuentran todos los grandes clásicos etíopes, los platos son muy sabrosos y están bien presentados. El lugar es algo turístico, pero atrae a una mayoría de población local. Buena atmósfera y música en vivo todas las noches: los cantantes circulan por la sala e interactúan con el público, creando un ambiente realmente auténtico. El mejor restaurante cultural de Adís Abeba.

Se trata de una institución en Gondar, sin duda el mejor restaurante para los visitantes extranjeros. Con su comedor bellamente decorado y su cocina etíope de alta calidad, este restaurante regentado por cuatro carismáticas hermanas es todo un éxito. Estarán encantadas de recibirle con bailes tradicionales y música en directo todas las noches. Entorno agradable, cocina deliciosa, ceremonia del café, servicio atento, terraza en un jardín agradable y tranquilo... No faltan elogios para esta buena dirección. Tienda de recuerdos.

Uno de los locales más bonitos de la ciudad, ideal para tomar una copa o un aperitivo a cualquier hora. En un bonito patio coronado por un capitel donde crece un cafeto, uno puede sentarse en una mesa de bambú para desayunar o, más tarde, para comer pasta o una buena comida etíope. La ceremonia del café se realiza durante todo el día y se puede aprovechar la oportunidad para leer la pequeña historia sobre esta bebida que se halla escrita en las paredes. Los precios son locales y el servicio amable. Hay conexión wifi gratuita, pero rara vez funciona.

Este nuevo restaurante de Arba Minch es uno de los mejores del país. Y por un buen motivo: el chef, formado en Adís Abeba, ofrece platos muy creativos con ingredientes locales, sobre todo pescado. La perca del Nilo es excelente, cocinada en una hoja de bananero con arroz, verduras y salsa de aguacate, o al vapor en vinagre blanco, con kale y salsa de cacahuete. Un verdadero descubrimiento culinario. Por si fuera poco, la cafetería sirve batidos y el comedor es agradable y está bien decorado.

El Goha es una institución en Gondar, uno de los hoteles más antiguos de la ciudad. Situado lejos del centro, en un promontorio que domina la ciudad, ofrece una magnífica vista desde la terraza del bar-restaurante frente a la piscina. En el vestíbulo, la ceremonia del café precede a una sala iluminada por ventanales. Un marco romántico para la cena. Un lado del restaurante está decorado al estilo tradicional etíope, el otro es más moderno, al igual que la carta, que ofrece platos clásicos y occidentales. Una dirección excelente.

Este nuevo restaurante ofrece ahora las mejores mesas de Lalibela. Se trata de un hermoso lugar, siempre lleno, así que en temporada alta se recomienda reservar. Durante el almuerzo y la cena, se sirve un magnífico bufé con un guacamole excepcional, de ensueño. Pero también hay todo tipo de ensaladas, verduras hervidas, carnes y platos tradicionales. Si aún no ha probado todas las especialidades, ahora es el momento. También se pueden pedir platos tradicionales a la carta, pasta y pizzas. Además, por la noche, grupos de música y baile tradicional animan el ambiente. La ceremonia del café se realiza durante todo el día, según la tradición. Puede sentarse en la sala ventilada o en la terraza de la azotea, especialmente por la noche, a la fresca. Su atento dueño ofrece una calurosa bienvenida. Wifi.

Aunque el hotel Seven Olives ya no puede competir con el resto, su restaurante siempre ha sido famoso y no sin razón. Siempre servirán excelentes injeras, la bayenet, o vegetariana, está muy lograda. Comida etíope y algunos platos internacionales y también pizzas. Ambiente tradicional y una terraza muy agradable y fresca en un gran jardín (aunque hay que acordarse de traer repelente antimosquitos). El ambiente es muy agradable por la noche. No se pierda su sabroso zumo de aguacate.

Uno de los numerosos restaurantes tradicionales de la capital que ofrece excelentes espectáculos de bailes tradicionales. El mobiliario, la ropa de personal, el servicio, la ceremonia del café, la arquitectura, todo es típicamente etíope sin ser sobrehecho. La comida es excelente, prueba de que el restaurante es tan frecuentado por turistas y expatriados que por los locales. Una gran tienda permite comer en el exterior. Se programan regularmente espectáculos de bailes y músicos folclóricos. Los precios siguen siendo correctos.

Con su espectacular vista de 360° de Lalibela, su arquitectura cósmica, que recuerda a un transbordador espacial, su agradable jardín y su buena cocina, este restaurante merece una visita. Susan dejó los fríos inviernos escoceses para abrir, con Habtamu, un etíope de Lalibela, esta «colina de las flores», traducción de Ben Abeba. La comida etíope e internacional es bastante clásica (tebs con injera, shiro, macarrones, hamburguesas...), pero también hay buenas sopas de lentejas, quiches con cebolla y tomate, así como un buen hachis parmentier (Shepherd's Pie). Vinos sudafricanos a 250 birrs por botella.

Un verdadero remanso de paz en un jardín adornado con bambúes y objetos artesanales, ideal para almorzar entre las visitas a los dos principales museos de la ciudad. En la carta encontrará excelente cocina etíope, pero también pasta, pizzas, ensaladas, curry... Servicio agradable y rápido. Excelente ketfo (el tártar de carne local), carne súper fresca y vinos a la carta. Un buen lugar.

Esta cafetería tiene una terraza con vista a las montañas circundantes, ideal para desayunar (gran variedad de zumos de fruta y pasteles) o simplemente para tomar algo al atardecer: mangos, piñas, papayas, aguacates traídos de Adís Abeba...

Este conocido restaurante local sirve excelente comida china preparada por el chef Nebiyu. Incluye especialidades de la región de Sichuan, con pimienta del mismo nombre, muy picante. Precios muy razonables y sabores exóticos. Los fines de semana es mejor reservar.

El principal interés de este establecimiento es que es a la vez un restaurante y una galería de arte. La sala tiene una decoración cuidada y cálida, por lo que permite descubrir, según las exposiciones, a los jóvenes talentos de la capital. En el plato, la tendencia es italiana (carnes, pizzas y ensaladas). Dispone de una amplia gama de postres, incluido crepes, una apuesta segura. Antes del servicio (durante o incluso después), puede sentarse en la barra: el ir y venir...

Este antiguo restaurante italiano, recientemente restaurado y considerado uno de los mejores (y más caros) de la ciudad, es una apuesta segura. Brad Pitt y Angelina Jolie lo disfrutaron. Cuenta con una amplia selección de antipasti y, por supuesto, de pasta, pero hay más. Los tallarines con trufas son una delicia y el tiramisú está bien hecho. Asimismo, tiene una carta de vinos italianos. El ambiente es anticuado pero agradable; los camareros son los mismos desde hace treinta años. Ideal para una cena romántica o con amigos. Sin embargo, los precios siguen siendo muy altos para Etiopía. Hace falta reserva.

Buen restaurante frecuentado por la burguesía local y la diáspora etíope que visita el país. Sirve comida internacional y etíope, especialidades de pescado, algunas ensaladas asiáticas y platos europeos. El pan y el brioche son caseros, y se usan para hacer sándwiches. En la planta baja, la cafetería es excelente para tomar un macchiato, un capuchino o un desayuno copioso. Los domingos se ofrece brunch jazz.

Para salir de la injera etíope, este renombrado restaurante de cocina armenia y libanesa ofrece una amplia selección de deliciosos mezze y kebabs, zumos de fruta y ensaladas en un ambiente original. Raciones generosas, servicio atento y amable. Una excelente opción.

Aparte de los restaurantes de los hoteles, este es un establecimiento a tener en cuenta. Elija la dirección antigua, al final de la avenida que bordea el lago. Se trata de una pequeña empresa familiar ubicada en un entorno agradable bajo las jacarandas, donde se sirve excelente comida italiana e incluso pizzas elaboradas en horno de leña algunas noches.

Emplazado en un antiguo edificio italiano al sur del centro, en la carretera de Harar, este restaurante es el más famoso de la ciudad, tanto por el entorno como por su comida, especialmente la lasaña. Las especialidades etíopes y las carnes a la parrilla también están en el menú.