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Budismo

En teoría, el budismo es una "escuela de vida" que conduce al Nirvana, la extinción de todo deseo (y, por tanto, del dolor de no poder satisfacer los propios deseos). Conociendo a los tailandeses y su sed de gratificación instantánea, cabe preguntarse si no hay aquí algún malentendido. De hecho, la inmensa mayoría de los habitantes del reino son budistas "a rachas". Se hace una ofrenda para pedir ayuda para un hijo que se ha ido a trabajar a Bangkok, para curar a un animal enfermo o para ganar la lotería. En el campo, sin embargo, las visitas al templo son más regulares y el monje budista es muy respetado. Puede instruir gratuitamente a algunos niños y ofrecer consejos (que suelen ser atendidos) a quienes acuden a consultarle.

Budismo Theravāda. Es el budismo practicado por la inmensa mayoría de los tailandeses. Procedente de la escuela Sthaviravāda (que en sánscrito significa laEnseñanza de los Antiguos), es una forma conservadora de budismo que se ha mantenido cercana a las enseñanzas originales. Se basa en las palabras del Buda Shakyamuni (el Buda) recogidas por sus contemporáneos. Los birmanos lo introdujeron en el país en el siglo VI. A partir del siglo XIV, el reino de Ayutthaya adoptó el budismo Theravāda como religión oficial. Incluso se encargó a monjes de Ceilán, donde estaba muy extendido, que propagaran esta fe entre los súbditos del reino.

La vida de Buda. El príncipe Siddhartha Gautama nació en el año 560 a.C.. Su padre reinaba en el principado de Kapilavastu, en la vertiente india del Himalaya. Por tanto, Buda no es una figura legendaria, sino un auténtico personaje histórico cuya vida es muy conocida. Su madre murió poco después de su nacimiento, y su padre volcó todo su afecto en este hijo único. Para evitar que conociera la miseria del mundo, le prohibió salir de las inmediaciones del palacio. A los 16 años, el príncipe se casó con una prima princesa. A los 28, abandonó el palacio para explorar los alrededores. Tuvo cuatro encuentros que cambiaron por completo su visión del mundo y de la vida. Primero conoce a un anciano decrépito que le demuestra que la juventud no dura. Luego conoce a un hombre que padece la peste negra y le muestra en qué consiste la enfermedad. Luego, la visión de un cadáver en una pira le enseña la realidad de la muerte. En su cuarta salida, se encuentra con un mendigo asceta que se muestra tan sereno en medio de todo su sufrimiento. A los 29 años, huyó al bosque, dejando atrás a su mujer y a su hijo. Para escapar del sufrimiento, primero siguió el ejemplo del mendigo asceta. Durante siete años practicó yoga, comiendo muy poco. Pero estas pruebas le parecieron un sufrimiento inútil. Se sumergió en la meditación y finalmente experimentó la Iluminación, alcanzada bajo un árbol en Bodhgaya (India). Se convirtió en Buda, el Iluminado. El hombre debe seguir un camino entre el ascetismo y el hedonismo, ambos igualmente antinaturales e inútiles: la Vía Media. El budismo, como el hinduismo, cree en la reencarnación. Aquellos que consigan poner fin al ciclo de reencarnaciones dejarán de sufrir y alcanzarán el Nirvana. Durante el resto de su vida, Buda llevó una vida de peregrino para poner en práctica su doctrina. No la predicaba con palabras, sino que ofrecía su vida como modelo. Sólo a veces respondía a las preguntas que se le hacían. Los escritos sobre sus sermones son, por tanto, muy escasos. Murió a la edad de 80 años, en el 480 a.C.. Se tumbó sobre su costado derecho y esperó a entrar en el Nirvana.

Animismo y creencias populares

Mientras se desarrollaba el budismo, el animismo, religión tradicional de los tailandeses, continuó paralelamente después del siglo XIII. El culto a la Casa de los Espíritus está muy arraigado en la Tailandia contemporánea. A menudo se ve un pequeño altar a la entrada de una casa, un hotel, una tienda, un campo, etc. Este pequeño habitáculo, colocado sobre un pilar o dosel, alberga estatuillas que representan a los espíritus protectores del lugar, a los que se ofrecen plegarias, comida, bebida, flores, incienso o dinero para satisfacerlos. Estas estatuillas también pueden utilizarse para combatir a cualquier espíritu malévolo que esté al acecho. Cuando, a pesar de las ofrendas y oraciones, los espíritus siguen siendo dañinos, sólo hay una solución: llamar a los bonzos al rescate. Vienen a exorcizar a estos demonios en miniatura rociando tu casa con agua bendita y oraciones. De este modo, los bonze satisfacen las creencias animistas de los tailandeses. Sin embargo, Buda dejó claro que los espíritus malignos no existen y que es inútil creer en supersticiones. Pero el bonze está llamado a resolver los problemas cotidianos y desempeñar el papel de astrólogo. Tiene que adivinar el número ganador en loterías clandestinas u oficiales; los temas de los exámenes para los estudiantes; el mejor día para una boda o para firmar un contrato, hacer un viaje, dar un golpe de Estado... El budismo theravāda tailandés ha absorbido esta práctica animista, si no puede hacerla desaparecer.

Desde la fundación de la dinastía Chakri, los tailandeses afirman que su país siempre ha conservado su independencia porque está protegido por una deidad llamada Phra Siam Deva Dhiraj. El ídolo, una pequeña estatua de oro, se encuentra en el Salón del Trono Phaisan Thaksin del Gran Palacio de Bangkok. Siempre que se produce el menor disturbio en el país, las autoridades le piden ayuda solemnemente. Nang Kwak es una deidad del folclore tailandés a la que se reza para atraer la buena suerte y la prosperidad. Tradicionalmente se la representa como una hermosa mujer vestida de rojo.

La influencia del hinduismo

Hay unos 7.000 hindúes de origen indio en el país. Mientras que el hinduismo ha tenido una gran influencia en Camboya, ha tenido menos en Tailandia. Tras la publicación del Ramakien, la versión tailandesa del Ramayana, la mitología hindú se infiltró en el budismo.

El Ramakian

El Ramayana es un poema épico escrito hace unos 2.000 años en la India por el poeta Valmîki. Es laIlíada y laOdisea de la India, pero más larga y complicada. El Ramayana fue transpuesto al tailandés, con el título de Ramakien, en 1807, por el rey Rama I, aficionado a la poesía. El Ramakien ha tenido una influencia fundamental en la vida espiritual y social tailandesa. La influencia del hinduismo, que ya era fuerte, se acentuó. El Ramakien proporciona el tema para las danzas clásicas tailandesas, los Khons, que hay que ver una vez en una cena espectáculo. Por último, cabe señalar que el nombre del héroe del Ramakien, Rama, es también el título de los reyes de Tailandia.

Islam

Hay más de 3 millones de musulmanes. La mayoría pertenece a la rama suní del Islam. La población musulmana es diversa y está compuesta por diferentes grupos étnicos: tailandeses autóctonos, malayos, chinos, rohingyas, etc. La opinión popular dice que la mayoría de la población musulmana se encuentra en las provincias de Satun, Yala, Pattani y Narathiwat, en el sur del país, cerca de la frontera con Malasia. Sin embargo, las encuestas del Ministerio de Asuntos Exteriores indican que en estas provincias sólo vive el 25% de la población musulmana. Por tanto, los musulmanes están dispersos por toda Tailandia, sobre todo en las grandes ciudades.

Cristianismo

En Tailandia sólo hay 300.000 cristianos, y los lugares de culto son relativamente escasos.