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El país con alma bilingüe

En Irlanda, todo el mundo habla inglés, pero el irlandés sigue siendo la lengua nacional. El irlandés es gaélico. Es la lengua oficial y se ha convertido en una de las lenguas oficiales de la Unión Europea.

El irlandés es una lengua celta relacionada con el galés, el córnico y el bretón. Los primeros hablantes de irlandés llegaron probablemente desde la Europa continental hace más de 2.500 años. Es cierto que aquí se hablaban otras lenguas antes que el irlandés, pero a principios de la era cristiana el irlandés se hablaba en toda Irlanda. Las primeras pruebas del irlandés antiguo son las inscripciones en piedras Ogham, que datan de los siglosV y VI. El irlandés primitivo se escribió por primera vez en alfabeto romano antes de principios del siglo VII, lo que hace del irlandés una de las lenguas vernáculas más antiguas de Europa

De las 1.761.420 personas que respondieron a la última pregunta del censo sobre el uso del gaélico, el 23% dijo que nunca hablaba irlandés, mientras que el 31% dijo que sólo lo hablaba en el sistema educativo. Del resto, el 33% de las personas indicaron que utilizan el irlandés menos de una vez a la semana, el 6% lo habla una vez a la semana y sólo el 4,1% lo habla a diario. La proporción es mayor en las zonas conocidas como Gaeltachtaí (Gaeltach singular), donde el irlandés sigue muy vivo.

Aunque el irlandés sólo lo habla regularmente el 4% de la población a diario, se sigue enseñando y sigue siendo una asignatura obligatoria. A menudo colorea la lengua de Shakespeare, que es también la de Oscar Wilde, Samuel Beckett, James Joyce y Roddy Doyle. Aparece en la frase inglesa, que condimenta a diario. El gaélico sigue vivo en libros, periódicos y revistas. El canal de televisión TG es totalmente en gaélico, está en la radio y en Internet.

¿Qué te parece probar algunas palabras en gaélico?

- ¡Sláinte! ¡Salud!

- Dia duit: Hola

- Go raibh maith agat: Gracias

- ¿Conas atá tú? ¿Cómo estás?

- Fáilte : Bienvenido

- Tá :

- : No

- Áth Cliath : Dublín

- Slán agat: Adiós

Atractiva Irlanda

Durante mucho tiempo, Irlanda fue un país que algunos de sus habitantes abandonaban. Las familias sabían que los hijos, los hermanos y los padres tendrían que abandonar su isla. Después de ser un país del que la gente se marchaba porque tenía que hacerlo, para sobrevivir, Irlanda acoge ahora a gente nueva. Hoy en día, los jóvenes irlandeses o los descendientes de irlandeses regresan al país, los emigrantes vienen de todo el mundo a vivir en Irlanda. La vida en Irlanda es envidiable. Si comparamos su PIB per cápita, podemos ver lo lejos que ha llegado. Aunque el PIB del país sigue siendo el de un país pequeño, su PIB per cápita en estándares de poder adquisitivo es el de un país rico. El PIB medio en Europa es de 29.700 PPA en 2020, en Irlanda es de 62.700 PPA. Irlanda ocupael segundo lugar en Europa, justo por detrás de Luxemburgo. Este es, por supuesto, uno de los factores que permite a Irlanda volver a su demografía anterior a la Gran Hambruna. Aunque en la isla viven aproximadamente 6,9 millones de personas, también hay una diáspora irlandesa muy numerosa y activa

Una diáspora 10 veces mayor que en la isla

Durante 120 años, estos emigrantes se mezclaron con sus anfitriones. Sus descendientes han llevado a Irlanda a todas las latitudes. Se calcula que hay al menos entre 50 y 80 millones de personas en todo el mundo con ascendencia irlandesa, lo que convierte a la diáspora irlandesa en una de las mayores de cualquier nación. Aunque históricamente la emigración de Irlanda ha sido el resultado de conflictos, hambrunas y problemas económicos, hoy esta diáspora es una oportunidad. Ha hecho famoso al país en todo el mundo. También ha sido un punto fuerte para Irlanda, ya que los expatriados han acudido a menudo al rescate de la tierra de sus antepasados. Los turistas estadounidenses siguen siendo los principales visitantes de la isla. Es la primera vez que la población de la República de Irlanda supera los cinco millones de habitantes desde el censo de 1851, cuando la población era de 5,11 millones. Esto también representa un aumento de 2,19 millones desde el censo de 1961.
Según la Oficina Central de Estadística, la migración neta positiva y el aumento natural han dado lugar a un crecimiento de la población de 34.000 personas en 12 meses. En 2021, más de 30.000 irlandeses volvieron a vivir en Irlanda, mientras que 22.000 irlandeses se trasladaron al extranjero. Es solo la tercera vez desde 2010 que regresan más irlandeses de los que se van.

La nueva cara de Irlanda

Un estudio de Berkeley Solicitors, de Dublín, traza los contornos de la población irlandesa

Elcrecimiento demográfico de Irlanda, con sus nuevas cifras, quintuplica la media de la UE en 2017. El número total de residentes en la República de Irlanda aumentó en 53.900 el año pasado, hasta casi 4,84 millones, lo que supone un incremento del 1,1%. Esta cifra está muy por encima de la media de la UE, que es del 0,2%, una tasa de crecimiento raramente 5 veces superior a la media de la UE. Irlanda tuvo la cuarta tasa de crecimiento demográfico más alta de la UE durante 2017. Irlanda tiene la población más joven de Europa y mantiene su posición como el país con la tasa de mortalidad más baja de la UE: 6,3 muertes por cada 1.000 habitantes frente a una media de 10,3 muertes por cada 1.000 en 2017. Al mismo tiempo, la población mayor de 65 años ha aumentado en 22.200 personas hasta abril de 2021.

Una instantánea del cambio poblacional en Irlanda: la metamorfosis poblacional está ya muy avanzada. En Irlanda hay un nacimiento cada 9 minutos, una muerte cada 17 minutos, un emigrante neto cada 41 minutos, una ganancia neta de una persona cada 13 minutos.
Todo esto significa que Irlanda ya no es sólo una tierra de turismo o emigración, sino un país que hace que la gente quiera venir a vivir aquí durante mucho tiempo. Al igual que su diáspora, la población nacional acoge su transformación. Esta transformación también está provocando cambios en el modo de vida irlandés. La mezcla de diversas influencias culturales se hace a la manera irlandesa. Estos cambios se están produciendo con la participación y aceptación de la población. Los irlandeses aprovechan los cambios en el país y acogen a los recién llegados de forma positiva. Son buenas noticias para Irlanda, que espera seguir ampliando su esfera de influencia política, económica y cultural. Por supuesto, a veces es necesario redondear las aristas y asumir los nuevos retos que surgen