Joyas maasai, fascinantes y coloridas

Los verás por todas partes: pulseras, collares, pendientes, cuentas de todos los colores... Aunque los inmensos collares(iruvusi) y brazaletes(emeirinai) masai tienen una función estética, social y ritual, pues significan la edad, el estatus e incluso el estado de ánimo de quienes los llevan, su atractivo para los turistas es grande, lo que ha propiciado el desarrollo de una industria artesanal solidaria en torno a estas joyas. Entre los objetos rituales maasai, son mucho más raros los adornos de plumas de avestruz de los moran (guerreros) y las armas maasai (lanzas que se pueden desmontar en tres), machetes, rompecabezas y escudos de piel de búfalo. Son objetos verdaderamente específicos de esta región de África. Las etnias sonjo y ndorobo también fabrican algunos arcos muy finos.

Una amplia gama de objetos de madera

Entre los recuerdos que se pueden traer están los pequeños taburetes o sillas de madera, que marcan el estatus social de sus usuarios y se encuentran en muchas tribus de África Oriental. Son muy sencillos para las mujeres y elaborados para los jefes. Más pequeño y juguetón es el bao, un juego que es el equivalente swahili del awale en África Occidental. El bao, que se remonta a la noche de los tiempos, consiste en un tablero con 2 x 6 casillas, a menudo doblado en 2, y 48 semillas. El objetivo es quitarle todas las semillas al adversario. En la costa swahili, donde crecen los cocoteros, también se fabrican objetos con la madera de los cocos, objetos útiles o decorativos, utensilios de cocina, cuencos bellamente decorados, etc.

Máscaras, objetos rituales raros

Las famosas máscaras se pueden encontrar por todas partes en puestos de souvenirs. Por desgracia, ninguna tribu fabrica ya máscaras rituales. Pero aún se pueden encontrar algunas muy bellas y expresivas, de hace más de cincuenta años, en auténticos anticuarios, principalmente del centro y sur de Tanzania, sobre todo de las regiones de Iringa y Tabora. La mayoría de estas máscaras eran de danza. Entre las antigüedades auténticas están las máscaras, o más bien cascos, makonde del sur de Tanzania, conocidas como mapiko, que se han vuelto extremadamente caras. También entre los makonde existen los labrets (o ndona), bandejas de madera para los hombres y de metal o marfil para las mujeres, que se encajan en el labio superior, se incisan y luego se ensanchan, y cuya función es decorativa.

Pinturas, cerámica y cestería en cada esquina

Hay pinturas, sobre todo de estilo tinga tinga, una forma de arte naif propia de la etnia makonde (en la frontera con Mozambique), que originalmente dibujaba en las paredes de sus chozas. Y un sinfín de objetos más, dependiendo sobre todo de las afinidades personales.
La alfarería siempre ha sido una técnica bien dominada en esta parte de África. Las etnias del suroeste del país (sobre todo los Kisis, en la región del lago Nyasa) fabrican una cerámica muy fina. Algunos artesanos saben trabajar la esteatita, un tipo de piedra caliza de color pastel, finamente trabajada y pulida para fabricar pequeños objetos decorativos o utilitarios.
Los bantúes, sobre todo los rangis de Kondoa, son excelentes cesteros, que utilizan cañas de papiro para fabricar cestas de todos los tamaños, trébedes, esteras, etcétera.