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La transformación de un modelo de negocio

Desde hace varios años, Qatar tiene la intención de diversificar su economía para reducir su dependencia de los hidrocarburos (actualmente en un 51%). Fiel a su estrategia de construcción de infraestructuras a gran escala, el país sigue llevando a cabo numerosos proyectos faraónicos. Ayudadas por unos medios financieros casi ilimitados, las autoridades han optado por una política centrada en las inversiones, sobre todo en urbanismo, carreteras, red pública de metro y transporte ferroviario, nuevo puerto comercial, nuevo aeropuerto internacional, infraestructuras de ocio y de prestigio... y en nuevas industrias: petróleo derivado, acero, aluminio. Las autoridades han puesto en marcha un plan de desarrollo a largo plazo, "Visión Nacional 2030", desde 2011, basado en 4 ejes: creación de centros de categoría mundial en torno a la economía del conocimiento (Ciudad de la Educación), desarrollo de un centro de transporte (metro, tranvía, nuevo aeropuerto), creación de un centro financiero (West Bay).

La Fundación Qatar es una institución estatal que se apoya en estos dos pilares: proporcionar a las jóvenes generaciones una formación intelectual de primer orden, impartida por las mejores universidades extranjeras situadas en los alrededores de Doha, y preservar la identidad cultural del país. Por supuesto, la fundación cuenta con una generosa financiación para poner en marcha su proyecto. Su proyecto estrella es, sin duda, Education City, adyacente al Parque Científico y Tecnológico de Qatar, dedicado a la incubación de nuevas empresas. Las autoridades qataríes también desean desarrollar el turismo: desarrollo exponencial de la capacidad hotelera del país, sobre todo con vistas a la Copa Mundial de la FIFA 2022, construcción de la isla residencial artificial de "Pearl Island", etc

Producción de gas licuado

Qatar está ahora codo con codo con Estados Unidos, el primer exportador mundial de gas licuado; el famoso GNL que está en la mente de todos desde que la guerra de Ucrania fue iniciada por Rusia. En 2021, Qatar Petroleum anunció la construcción de la que será la mayor instalación de producción de GNL del mundo en 2030: el Proyecto de Expansión del Campo Norte, por valor de 29.000 millones de euros. Por ello, las previsiones son buenas: se espera que la producción pase de 77 millones de metros cúbicos al año a 110 millones en 2025, gracias sobre todo al proyecto NFE, que representa la primera fase de la expansión del GNL.

Los principales proyectos para 2022 están casi terminados

Qatar ha invertido cerca de 75.000 millones de dólares en la construcción de nuevas infraestructuras, como preparación para la Copa del Mundo, pero también de forma más permanente para impulsar su economía a través del turismo (más bien orientado a los negocios) y para abrir el país al mundo de una forma de poder blando, como otros países del Golfo en la actualidad, principalmente los Emiratos Árabes Unidos. Qatar tiene un nuevo metro, ¡4 líneas de una sola vez! Oryx Express es una red ferroviaria de más de 300 km, compuesta por cuatro líneas que dan servicio a 98 estaciones y, en particular, a todas las sedes del Mundial de Fútbol de 2022.
Doha se ha dotado de un flamante aeropuerto de 500.000m2 capaz de recibir 24 millones de pasajeros al año, con un hotel, una línea de metro directamente conectada con el centro de la ciudad. El Centro Financiero Barwa, cerca de la Corniche, en el centro de la ciudad, está diseñado para albergar instituciones financieras y de inversión y bancos. ¡Dinero!

Uno de los proyectos más impresionantes es la creación desde cero del nuevo barrio de Msheireb Downtown: un antiguo distrito que fue arrasado y reconstruido como un barrio ecológico de 31 hectáreas para devolver el alma al corazón de la ciudad junto al zoco Waqif. Aquí, el agua del manantial que fluía originalmente está por todas partes en las calles y en los numerosos jardines. Se han favorecido los edificios de tamaño humano que recuerdan a la arquitectura tradicional del desierto, lo que contrasta con los otros distritos de rascacielos de estilo americano de la ciudad. Coste del proyecto: 20.000 millones de riales (4.200 millones de euros)

Otro gran proyecto faraónico es la nueva ciudad de Lusail, también conectada al metro en el norte de Doha, como extensión de The Pearl. Este proyecto incluye una nueva "ciudad inteligente" que, una vez habitada y terminada, debería atraer a unos 100.000 visitantes con sus tiendas, avenidas y puertos deportivos

La Isla de la Perla, que -al igual que la Sagrada Familia de Gaudí- nunca está terminada, todavía tiene grúas bailando en su horizonte, mientras que su "crucero" bordeado de yates alberga el nuevo hotel Saint Regis, inaugurado para el Mundial de 2022. Otra isla artificial, la de Gewan, esta vez con villas de lujo, pero sobre todo con un enorme parque de atracciones y actividades deportivas acuáticas, debería ver la luz en los próximos años.

Objetivo: triunfar en el Mundial

La monarquía qatarí también es una apasionada del fútbol: ha comprado el PSG, parte de los derechos del campeonato francés y sus retransmisiones y, en 2022, la Copa Mundial de la FIFA. Por primera vez en la historia de la Copa Mundial de Fútbol, la competición se celebra en un país de Oriente Medio, en un país pequeño, árabe y musulmán. La candidatura qatarí atrajo primero a cuatro embajadores: Zinedine Zidane, Pep Guardiola, Roger Milla y Sir Alex Ferguson, y después al Comité Ejecutivo de la FIFA. Qatar propuso estadios de última generación con aire acondicionado alimentado por energía solar para mantener una temperatura constante de 27 grados, y pospuso el Mundial de junio a noviembre para evitar las abrasadoras temperaturas. Los partidos se disputarán en sedes situadas en un radio de 50 kilómetros entre sí, unidas por un metro. Qatar se adelantará a los acontecimientos, ofreciendo 80.000 habitaciones de hotel adicionales para el evento. Esto es relativamente grande para el país y no muy grande para un Mundial. El país apuesta por este sector y realiza grandes inversiones. Cada vez se construyen más hoteles y cada vez son más lujosos El país quiere invertir en el turismo, más concretamente en el mercado MICE, es decir, en los viajes de negocios.