Artesanía
La cestería, que utiliza juncos y palmas para tejer sombreros, cestas y canastos, perpetúa antiguas tradiciones artesanales. La alfarería y la cerámica también están muy presentes, con reproducciones de estatuas taínas en terracota. Entre los objetos representativos de la cultura local, las muñecas Limé, figuritas de cerámica con rostros sin rasgos que simbolizan el mestizaje del país y visten trajes tradicionales, proceden de Moca y Santiago. La cerámica decorativa (jarrones, lámparas) también es muy apreciada, ¡aunque pesa mucho traerla de vuelta! La madera se talla en baquetas (al sureste de la capital), utensilios de cocina y esculturas de estilo afrocaribeño. La caoba se utiliza mucho, pero como las especies raras están protegidas, esta artesanía es menos productiva que en Haití. La pintura también está muy presente en todos los mercados artesanales. Más que de obras de arte, deberíamos hablar aquí de artesanía, ya que se trata de pinturas callejeras producidas en gran número. Su inspiración es ingenua y de origen haitiano. También se pueden encontrar obras únicas de artistas más renombrados, sobre todo en los comercios de Las Terrenas, Punta Cana, Santo-Domingo y Bayahibe. En la región central de La Vega también se pueden comprar máscaras artesanales producidas durante el carnaval.
Por último,pero no por ello menos importante, la fabricación de puros representa una gran parte de la actividad agrícola y artesanal dominicana. Al igual que en Cuba, los fértiles suelos de la República Dominicana son ideales para cultivar tabaco de calidad. De hecho, el país es el primer productor mundial de puros de alta gama Para beneficiarse de los mejores precios y evitar las falsificaciones, diríjase directamente a las fábricas oficiales.
Cesta gourmet
En cuanto a productos de consumo, el Caribe cuenta con dulces tropicales de muy buena calidad, como la vainilla y el ron, por supuesto Orgullo y alegría nacional, la bebida espirituosa elaborada con caña de azúcar cultivada en el país goza de gran prestigio internacional. Tan popular como la cerveza nacional Presidente, el ron dominicano se presenta en diversas calidades y marcas, siendo las más conocidas y populares Barceló y Brugal. Menos caro que en nuestro país, prefiera el ron de 12 años, que suele ser tan bueno como nuestro XO. Siguiendo con los líquidos, además del excelente café que se produce aquí, hay que mencionar la Mamajuana, un digestivo típico dominicano elaborado con ron, vino tinto y miel macerados en una botella previamente rellena de corteza y hierbas locales. Con fama de medicinal, a este licor se le atribuyen propiedades digestivas y afrodisíacas. Lo más fácil es comprar una botella de Mamajuana que contenga sólo las especias y cortezas, y rellenarla después con los líquidos necesarios. Se pueden encontrar por todo el país.
La República Dominicana también cuenta con miles de hectáreas dedicadas al cultivo de cocoteros para la producción de aceite de coco. Se trata de un oficio muy antiguo en el país, que se practica en todas partes, sobre todo en las islas de Saona y Bayahibe. El aceite de coco tiene muchos beneficios, como hidratar y reparar la piel y el pelo secos. También es un buen ingrediente para cocinar y un excelente repelente de mosquitos También abundan los árboles de cacao, que producen cacao orgánico de primera calidad que se exporta a todo el mundo. Se puede encontrar en diversas formas en mercados y supermercados, pero también directamente de los productores.
Ámbar y Larimar
El larimar. Descubierto en el suroeste de la República Dominicana en 1916 por el sacerdote Miguel Domingo Fuertes de Lorenre, el larimar es una piedra semipreciosa, más concretamente una pectolita azul. Al negársele el permiso para explotarla, la piedra permaneció en la sombra hasta que fue redescubierta por Miguel Méndel en 1974. Fue Méndel quien la bautizó "larimar", contracción del nombre de su hija Larissa y la palabra mar , por haberla descubierto junto al mar. En la República Dominicana, esta piedra se asocia a los sentimientos, e incluso al amor, hasta el punto de que es costumbre regalarla en las bodas. Pero también se le atribuyen otras virtudes: la turquesa dominicana tiene fama de aportar calma, armonía y alegría de vivir, disipando la ira y la irritabilidad. Otros afirman que desarrolla la compasión y tiene efectos beneficiosos sobre la garganta y la cabeza. Finamente tallada y a veces incorporada a joyas, se puede encontrar en muchas tiendas de recuerdos de la isla, pero es en las regiones de Bahoruco y Barahona donde se encuentra el mayor número de talleres de tallado. Allí se encuentran las mejores gangas
Ámbar. La República Dominicana también posee enormes reservas de ámbar, del que se extraen varios miles de toneladas al año. El origen de esta piedra semipreciosa de origen vegetal (la única en el mundo junto al azabache) se remonta a 48 millones de años. Llamada "piedra de savia" por los romanos, elektron por los griegos y bernstein (piedra ardiente) por los alemanes, el ámbar toma su nombre del árabe anbar, que significa "resina fosilizada". Esta resina vegetal es, de hecho, una fotografía del pasado: es el testigo científico de las transformaciones y mutaciones que ha sufrido la Tierra a lo largo de varias decenas de millones de años. Directamente ligada a las condiciones climáticas específicas del país, la gama de tonos del ámbar dominicano es la más amplia del mundo, con líneas blancas, rojas, negras, amarillas, opalinas, verdes, azules, púrpuras, doradas y transparentes. Hoy en día, el ámbar es uno de los materiales más trabajados por los artesanos dominicanos. Pero cuidado: esta piedra se falsifica fácilmente, y no es raro que un turista ingenuo pague el precio de la resina milenaria por un bonito collar de plástico. Por ello, el aficionado ilustrado preferirá las tiendas oficiales y las joyas acompañadas de su certificado de origen.
