CARNAVAL EN REPÚBLICA DOMINICANA

La fiesta nacional es la expresión de la idiosincrasia dominicana y su celebración más importante. El júbilo popular se extiende por todo el país en memoria del día de la Independencia, el 27 de febrero de 1944. Participan todas las clases sociales y cada ciudad tiene sus costumbres. Como en todas las islas del Caribe, el carnaval moviliza a la gente y es una celebración popular en República Dominicana.
El origen del carnaval se remonta a las fiestas saturnales del Imperio romano. Su celebración se inició con la conquista española, cuando los colonizadores lo importaron a América. El primer carnaval dominicano se celebró en febrero de 1520 en La Vega Vieja, en honor a Bartolomé de las Casas, que visitó la región. Durante la época colonial se celebraban numerosos carnavales, como el de Carnestolenda, o los que se desarrollaban en honor a San Juan Bautista, Las Mercedes, San Miguel, San Carlos, Corpus Christi, etc. Los habitantes se disfrazaban de moros y cristianos para las celebraciones. Originalmente, los dos períodos de su celebración correspondían a los días previos a la Cuaresma y al solsticio de verano. Ya en 1795 se celebraban carnavales en Santiago con motivo de la fiesta de Santiago Apóstol y por Corpus Christi. El carnaval salvaje de Cabral, que coincide con la Semana Santa, tiene orígenes africanos.
Las fechas del carnaval de hoy coinciden con el aniversario del Día de la Independencia Nacional, el 27 de febrero, y el aniversario de la Restauración de la República, el 16 de agosto. El carnaval es sobre todo una fiesta popular en la que la improvisación colectiva juega un papel importante. Todas los estratos de la sociedad participan. El ambiente festivo que reina permanentemente en todo el país encuentra su apoteosis en esta celebración. Las máscaras y los trajes recuerdan las tradiciones y costumbres del pasado, un pasado con raíces africanas y españolas, cuyas diferencias culturales se reflejan en los grupos o comparsas que desfilan.
Cada localidad tiene sus propias tradiciones bien establecidas, con sus máscaras, trajes, música y personajes. En el exitoso desfile de personajes, los más populares son los africanos, los indios, el Alí Babá, los diablos cojuelos, las gallinas, Se me muere Rebeca, los gallos, el Califa y los caimanes. Los carnavales más famosos son los de Santo Domingo, San Pedro de Macorís, Montecristi, Samaná, Santiago y La Vega.

El carnaval de Santo Domingo se celebraba originalmente en El Conde. La construcción del Malecón, el paseo marítimo, ha sustituido al antiguo emplazamiento; aquí desfilan hoy las mejores comparsas del país. Termina con un colorido desfile de gala en el Malecón.

En San Pedro de Macorís, las guyolas desfilan con trajes decorados con pequeños espejos al son de tambores rústicos. También marchan los cocolos, descendientes de antiguos esclavos cuya tradición de teatro-danza afroinglés está catalogada como Patrimonio Inmaterial por la Unesco. La tradición del teatro-danza cocolo nació a mediados del siglo XIX entre los inmigrantes británicos del Caribe que vinieron a trabajar a República Dominicana. Con idiomas y culturas diferentes, esta comunidad fundó sus propias iglesias, escuelas, organizaciones benéficas y servicios de autoayuda. Las representaciones de teatro-danza eran su forma más específica de expresión cultural. Mezclando música y danza, esta tradición se inspiraba estilísticamente en las fuentes africanas, que enriquecían con elementos europeos, especialmente bíblicos. Las representaciones teatrales de los cocolos tenían lugar en Navidad, el día de San Pedro y durante el carnaval, entrelazando temas prestados de diferentes culturas, como villancicos, mascaradas o adaptaciones teatrales de tramas o historias populares, como por ejemplo David y Goliat, Moko-Yombi o indios y vaqueros.

En Monte Cristi, todos los domingos de febrero tiene lugar en las calles la lucha entre civiles no disfrazados y toros enmascarados que van armados con un látigo.

En Samaná, los demonios salen todos los domingos de febrero armados con látigos y vejigas, acompañados de la Muerte, un personaje aterrador.

El carnaval de La Vega es uno de los más antiguos del país. Los demonios cornudos, con cuernos adornados con espinas, azotan a los espectadores de manera ininterrumpida.

Algunas figuras del carnaval dominicano:

El rey Califa: es un poeta vestido con un frac y un sombrero negro. Critica a los políticos y a las figuras públicas. Empieza el gran desfile oficial del carnaval.

Los diablos cornudos: son el emblema del carnaval y el alma de la fiesta. Según la leyenda popular, representan a los espíritus malignos. Llevan máscaras con grandes cuernos y enormes dientes puntiagudos. Persiguen al público golpeándolo simbólicamente con vejigas de vaca.

Roba la gallina: un hombre disfrazado de mujer con pechos grandes. Representa a una gallina pidiendo comida para sus polluelos. Durante el desfile, pide dulces al público.