Las personas que poseen una segunda vivienda pueden optar por alquilarla para cubrir los gastos de mantenimiento, pagar los servicios públicos y permitir que otras personas la disfruten cuando no esté ocupada. Sin embargo, antes de dar el paso, hay que tener en cuenta una serie de elementos importantes Permitirán a los propietarios tener éxito en su proyecto de alquiler de temporada y hacer que la propiedad sea atractiva para los veraneantes. He aquí algunas explicaciones.

¿Por qué y cómo alquilar su segunda vivienda?

Los propietarios de una segunda vivienda tienen que hacer frente a diversos gastos. Entre ellos están el mantenimiento de la casa, las cargas mensuales, el coste de los impuestos locales y el pago de las cuotas mensuales de la hipoteca. Una buena manera de hacer frente a estos gastos es alquilar la propiedad por temporadas. La ventaja no es sólo económica, sino que también permite a las personas que están de paso disfrutar de un hogar confortable para su estancia mientras se mantiene el lugar vivo.

Antes de alquilar una segunda vivienda, hay que dar algunos pasos. Alquilar una segunda vivienda implica declarar el inmueble como "vivienda turística amueblada" ante el ayuntamiento correspondiente, independientemente del periodo anual de alquiler. Se trata simplemente de una información comunicada a la comuna. No obstante, hay que tener en cuenta que los propietarios que olviden declarar su vivienda como alojamiento turístico amueblado pueden ser multados. También debe tener en cuenta la ubicación del alojamiento, ya que en las ciudades de más de 200.000 habitantes y en algunos municipios como Aix-en-Provence, Annecy, Biarritz y Tours, se requiere una autorización del ayuntamiento además de la declaración.

Una vez hecha la declaración (y la autorización del ayuntamiento si es necesario), es el momento de preparar un anuncio para el alquiler de la vivienda y publicarlo. Para ello, los propietarios de una segunda vivienda pueden recurrir a una agencia inmobiliaria local, a un sitio de reservas en línea, pero también a los ayuntamientos y a la oficina de turismo. Por supuesto, el anuncio debe ser atractivo. Fotos de la casa, superficie, bicicleta eléctrica disponible, piscina, proximidad a los comercios, muchos detalles marcan la diferencia.

¿Cómo hacer que una segunda vivienda sea atractiva para los futuros inquilinos?

Hay diferentes maneras de hacer que una segunda vivienda sea atractiva para los inquilinos. Y todos estos detalles deben incluirse en el anuncio. Para alojar a familias y grupos de amigos, la casa o el piso debe ser espacioso e incluir una variedad de instalaciones para dormir, electrodomésticos, un balcón, una terraza, una chimenea para los fuegos de invierno, un jardín y, en el mejor de los casos, una piscina. La ubicación geográfica de la residencia también es importante. Tiene más posibilidades de alquilar si el inmueble está en una ciudad dinámica, en medio de un campo bucólico, junto al mar o en la montaña. Sin olvidar los lugares de interés cercanos, los posibles paseos a pie o en bicicleta y otros elementos que contribuyen a la riqueza y especificidad de la región (viñedos, playas, parque natural regional, etc.)

Los inquilinos de temporada también dan mucha importancia a estas instalaciones, que les permiten cambiar sus hábitos y hacer su estancia aún más agradable. Por ejemplo, es aconsejable proporcionar bicicletas eléctricas holandesas para dejar el coche e ir de compras, a pie o a un lugar cultural. Amsterdam Air ofrece bicicletas holandesas de alta calidad, cómodas, resistentes y perfectas para pedalear sin cansarse. También hay un spa personal, lo que hace que la estancia sea relajante. Con respecto a estas instalaciones especiales, los propietarios deben comprobar regularmente el funcionamiento de las baterías de las bicicletas o de la bomba del spa antes de alquilarlas. Los inquilinos de temporada que encuentren un equipo que funcione mal no dejarán de comentarlo

Por último, las fotos del anuncio deben ser atractivas. Deben mostrar un interior acogedor, limpio y cuidado, así como las instalaciones y espacios que marcan la diferencia (jacuzzi, patio, etc.), sin olvidar el exterior. El jardín, la terraza, la vegetación y las vistas, si son excepcionales, deben aparecer absolutamente para que la gente quiera hacer clic y reservar.