Estancia : Ruta gastronómica y vinícola por Alsacia
Dado que la gastronomía y la viticultura son esenciales en Alsacia, es posible realizar completas rutas gastronómicas para disfrutar de ellas. ¡El especialista en esto es L'Alsaciette! Tendrá varias posibilidades, e incluso la oportunidad de hacer recorridos a medida en un minibús de 9 plazas.
Resumen de la estancia
El mejor momento para ir
3 días
€€ - Encanto y comodidad
Detalle de la estancia : Ruta gastronómica y vinícola por Alsacia - 3 días
Día 1: Entre montañas y viñedos
Pasos: Colmar, Eguisheim, Munster
En Colmar, tenemos un desayuno tradicional, con, por ejemplo, un pastel típico alsaciano, el croissant o el pain au chocolat cubierto de azúcar. A continuación, partimos hacia el valle de Munster para descubrir la Maison du Fromage, que ofrece un museo y degustaciones en torno a este queso esencial. A mediodía, subimos a la Ferme aux Rennes, donde almorzamos muy bien y nos encontramos con los fieles amigos de Papá Noel. Finalmente, en el camino de vuelta, nos detenemos en algunas pequeñas bodegas antes de pasar por Eguisheim, elegido el pueblo más bonito de Francia.
Día 2: Entre viñedos y castillos
Pasos: Colmar, Ribeauvillé, Saint-Hippolyte, Kaysersberg
Todo comienza en el castillo de Haut-Koenigsbourg, que se puede visitar por su cuenta o con un guía. Para abrir el apetito, deténgase en Saint-Hippolyte en una tienda de vinos antes de comer en uno de los numerosos restaurantes típicos de la Ruta del Vino. El pequeño paseo digestivo se realiza en Ribeauvillé con la visita de sus tres castillos. Entre Ribeauvillé y Kaysersberg, también elegido pueblo favorito de los franceses, puede detenerse en una bodega o esperar a llegar a Colmar para merendar alrededor de una pastelería con vistas a la Pequeña Venecia.
Día 3: Siga la ruta del vino
Pasos: Marlenheim
La Ruta del Vino de Alsacia es la más antigua de Francia Podrá visitar pintorescos pueblos, magníficos paisajes e increíbles ciudades vinícolas mientras conoce a apasionados viticultores. Marlenheim es la puerta de entrada a esta ruta del vino. Si puede, elija el otoño, ya que el paisaje es increíble con sus hojas de parra doradas. Si quiere disfrutar al máximo de los viticultores, tenga cuidado y no conduzca después de varias catas. Le recomendamos que visite las bodegas por la mañana, cuando hay menos gente, y que se limite a cuatro. En efecto, además de la necesaria moderación en el consumo de alcohol, los vinos son tan ricos en aromas que no pueden apreciarse plenamente tras demasiadas degustaciones.
Para disfrutar de la ruta del vino en bicicleta, tome la Véloroute du Vignoble d'Alsace, que atraviesa castillos, pueblos típicos y viñedos de distintas variedades de uva con numerosos carteles explicativos. La ruta tiene 131,5 kilómetros y está unida a un tramo de la EuroVélo5. Sigue antiguas vías de ferrocarril y partes de la antigua calzada romana, lejos del tráfico y en plena naturaleza.
Muchas oficinas de turismo de la región ofrecen excursiones de ecoturismo por los viñedos. Algunos viticultores proponen descubrir los animales que habitan sus tierras, disfrutar de una cena insólita en la finca, jugar y aprender sobre la profesión, ¡o incluso meditar y desarrollar los cinco sentidos! Los interludios vitivinícolas de la Ruta del Vino ofrecen estas actividades combinadas con degustaciones de queso y vino o comidas tradicionales, e incluso puede dar un paseo por los viñedos en un autobús descapotable, ¡con la melena al viento!
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