Los mejores alojamientos Hajar

A la entrada de Nizwa y a 3 kilómetros del centro histórico, éste es el hotel provincial por excelencia, con su personal histórico, sus amplios y lustrosos suelos y sus espaciosas habitaciones y apartamentos, recientemente renovados y que ofrecen, por tanto, una muy buena relación calidad-precio. Dispone de una piscina al aire libre en un gran patio para refrescarse, un pequeño gimnasio y un gran restaurante, popular entre los lugareños y los turistas, que ofrece platos de bufé y a la carta. Pida una habitación en el ala nueva y más tranquila de la parte trasera del edificio.

El hotel de escala y carretera por excelencia, la Fórmula 1 del Hajar, sin otra vocación que la de proporcionar al viajero una cama y aire acondicionado adecuados, una ducha con agua caliente, un televisor con canales vía satélite después de un día de turismo o de senderismo. Tiene todas las características habituales de este tipo de establecimiento local: arquitectura masiva, azulejos llamativos, un claro gusto por la luz cruda, efectos decorativos a los que el corazón de un europeo sólo puede permanecer impenetrable. Habitaciones o apartamentos para hasta 6 personas, restaurante en el sótano.

En la parte baja del antiguo pueblo, en el corazón del oasis, ésta fue la primera casa tradicional que se transformó en casa de huéspedes, iniciando este tipo de turismo en Omán. Repartida en varios niveles (no recomendada para ancianos), conserva el ambiente más auténtico. Todo recovecos, alberga 15 habitaciones para 1 a 7 personas con colchones en el suelo, aire acondicionado, baño compartido en los rellanos o baño privado, según se desee. Nos encanta la bonita terraza cubierta rodeada de palmeras y el restaurante de la azotea. ¡Encantador!

Esta encantadora pensión, situada a 200 metros del Fuerte, cuenta con una baza importante: ¡un jardín con una auténtica piscina! El laberinto de escaleras y medios niveles conduce a bonitas y confortables habitaciones (aire acondicionado, baño privado, colchones en el suelo o camas a elegir) repartidas en cuatro casas tradicionales. Desde la azotea alfombrada y el restaurante con sus sillas y mesas de materias primas, la vista se sumerge en el oasis y las casas antiguas. En la planta baja, el café y los dátiles se sirven en los encantadores majilis.

En el espíritu de un pequeño fuerte, se trata de un establecimiento horizontal con 2 vastos patios rodeados, como un camino de ronda, por el cortejo de 53 habitaciones y 2 suites. Recientemente renovadas, las habitaciones ofrecen un alto nivel de confort (aire acondicionado, TV, minibar) y una decoración de buen gusto. Uno de los patios alberga una agradable piscina, el otro la terraza del restaurante de cocina internacional. También hay una zona de juegos para niños, 3 bares con licencia, gimnasio y sala de vapor. El hotel está dirigido por el francófono Joseph.

Un caserío de varias casas del siglo XVI en el casco antiguo ha recuperado su antiguo esplendor, como legado de otra época. Cada casa tiene unas cuantas habitaciones, algunas ciegas, pero todas cómodas, climatizadas y típicas, con cuarto de baño privado adjunto o en el rellano. Los majilis son lugares tranquilos para descansar y leer, y algunas casas tienen incluso una azotea exterior desde la que admirar el oasis de Nizwa. Posibilidad de privatización para pequeños grupos o familias. Un verdadero favorito

A 20 km del centro histórico, es el hotel más lujoso de Nizwa y sus alrededores. Con 120 habitaciones bien equipadas, 4 bares y cafeterías, un restaurante, una gran piscina, un enorme vestíbulo y tiendas al aire libre de estilo árabe para relajarse por la noche, ofrece una cómoda escala de nivel internacional. No se puede ir andando a Nizwa, pero se puede descansar al fresco y en calma, y los niños tienen mucho espacio para jugar. También hay varias salas de reuniones para los viajeros de negocios.

Este es el complejo más lujoso de Hajar. Con su estilo minimalista, su sobria arquitectura está enteramente dedicada a sublimar el sitio: este vertiginoso cañón con una piscina infinita, 82 habitaciones sublimes, 33 villas con piscina privada y el Punto de Diana - una plataforma suspendida sobre el vacío. Los servicios e infraestructuras están en sintonía: restaurantes gourmet, un spa excepcional, una amplia gama de experiencias y actividades - incluyendo vía ferrata, tirolinas, tours culturales...

A 2.000 metros de altitud, en un paraje totalmente exclusivo, la carretera que conduce a la meseta se detiene al borde de un vertiginoso cañón. Allí se alza el Alila, mimetizado con su entorno mineral, prometiendo una estancia rejuvenecedora en suites eco-chic sobrias y refinadas. Desde el restaurante en la ladera hasta la piscina infinita, el panorama es XXL. En el interior, el ambiente es envolvente: piscina climatizada, bar acogedor, salones voluptuosos, gran chimenea, spa excepcional. También hay un gimnasio y un abanico de experiencias de calidad.

Esta casa es una joya escondida. Situada en plena naturaleza, no está en el antiguo pueblo de Misfah como las casas de huéspedes, sino enfrente, al borde del wadi (barranco). La vista panorámica del oasis y las montañas desde la terraza es impresionante, una postal del Sultanato que todos soñamos con guardar en la memoria. Magníficamente equipada para dos personas, la casa ofrece todas las comodidades modernas. Cocina totalmente equipada, cuarto de baño, sala de estar, aire acondicionado e incluso bañera de hidromasaje al aire libre. Se pueden servir comidas por encargo.

¡El lugar es impresionante! Plantado en la ladera de una montaña al borde del vacío, El Suwgra es un caserío tradicional de más de 500 años de antigüedad, formado por casas de piedra seca dispuestas escalonadamente para adaptarse a la accidentada topografía. Para una noche o unos días de desconexión total, no hay nada mejor Es un lugar encantador, con salones en terrazas desde los que admirar el paisaje, habitaciones cómodas (con baño privado con ducha o bañera) pero muy típicas, y deliciosa cocina local. ¡La vista de las montañas desde todos los lados es impresionante!

Diseñada por un joven omaní que se inspira en las redes sociales sin renegar de la tradición, esta nueva casa de huéspedes está ubicada en una casa tradicional renovada con gusto. Presume de una decoración ligeramente más moderna que la media, e incluso cuenta con una habitación con baño abierta al paisaje. Apreciará el cuidado que se ha puesto en cada elemento de la decoración, desde la ornamentada puerta de entrada hasta los farolillos del patio... La ubicación en sí es encantadora, al borde de una pequeña plaza justo al lado de Rogan, el café con más estilo de Misfah.

Buceando directamente en el uadi Muaydin, Sahab es el único hotel boutique de la zona. Renovado en 2018, tiene 27 confortables habitaciones redecoradas en tonos suaves y dispuestas en forma de U alrededor de un jardín de plantas endémicas. La piscina tiene vistas al cañón, al igual que el bar y las mesas puestas al borde del vacío. Pero también puedes comer dentro en el acogedor restaurante. En sintonía con el sitio, el URU Spa ofrece una gama de tratamientos revitalizantes. Durante el día, puede aprovechar la gama de excursiones y actividades: picnic, senderismo, escalada, bicicleta de montaña.

El camino, luego la pista, es largo, hermoso y vertiginoso, hasta este altiplano que uno toma con gusto por el techo del sultanato! A más de 2.200 metros sobre el nivel del mar, los despertares de invierno son de 4° como máximo, y en verano se puede disfrutar de 15° o 24° bajo el sol brillante. Como en los otros dos complejos un poco más abajo, encontramos el binomio chalets + tiendas de campaña, los primeros son espaciosos, con TV, aire acondicionado y un baño, los segundos están equipados con camas menos cómodas y un baño con ducha exterior pero privada. Restaurante y piscina. 4x4 obligatorio.

A casi 2.000 metros de altitud, este establecimiento es como un refugio estelar. Está formado por edificios cúbicos climatizados y/o con calefacción (según la temporada) del tipo "estación científica en Marte" (chalets, dicen) con baños, camas decentes y amplias terrazas privadas. En el lugar: restaurante, barbacoa, piscina exterior climatizada, diversas actividades (senderismo y bicicleta de montaña en particular)... y toda una zona para pasear en libertad (vistas). El establecimiento es accesible sin 4x4 (aunque no se recomienda un Mini Cooper).

Este hotel ofrece 60 unidades con vistas, incluidos 14 chalés a nivel del jardín con amplias terrazas privadas. La disposición en forma de U permite el máximo acceso al recinto: desde el restaurante con su terraza panorámica, pasando por la piscina climatizada al borde del barranco, hasta la zona de barbacoa donde se puede picar un kebab mirando al cielo(sama en árabe). Aunque confortable, el complejo es más alto y macizo que la media y, por tanto, más adecuado para grupos (sala de conferencias) o familias (gran zona de juegos, habitaciones comunicadas). Gimnasio, torre de observación.

De lo que era un caserío de casas de piedra seca en la inmensidad mineral de Jebel Akhdar, el grupo omaní Sama -conocido por sus ecolodges y pequeños campamentos integrados en su entorno- ha diseñado un confortable refugio para excursionistas y amantes de la montaña. sólo 3 habitaciones, de estilo tradicional pero confortables (con baño privado), y un pequeño restaurante donde saciar el hambre tras recorrer el famoso Balcony Walk , que empieza justo al lado.

Este hotel se inauguró en 2023 y ofrece 15 llaves. Sin ningún encanto particular, su principal ventaja es que está situado en el corazón del casco antiguo y ofrece ascensor y todas las comodidades modernas. Se trata de un detalle importante para quienes no pueden acceder a las casas tradicionales pero desean alojarse en el casco antiguo. Las habitaciones, desde las estándar hasta las familiares, están todas climatizadas y, para el desayuno, se puede elegir entre una versión omaní y otra continental. En resumen, es una dirección fácil y bien situada

En el corazón de las ruinas del antiguo pueblo de Al Hamra, he aquí un lugar encantador para alojarse. Esta antigua casa familiar, construida con arcilla hace unos 300 años, ha sido notablemente restaurada y desde 2022 ofrece un puñado de habitaciones dobles o familiares, todas con aire acondicionado y decoradas con un estilo sobrio pero de buen gusto. Algunas habitaciones comparten cuarto de baño, mientras que otras disponen de uno privado (preguntar al reservar). Un detalle lo suficientemente raro como para que merezca la pena mencionarlo: el desayuno es muy copioso, con fruta, queso ¡e incluso bollería!