Los mejores alojamientos Sud

Las tradicionales cabañas dorze, muy bien conservadas por Makonnen Zoude, son un verdadero remanso de paz. El lugar es muy agradable para quienes quieren relajarse en medio de la naturaleza gracias a sus siete casas dorze especialmente diseñadas para los visitantes. Son austeras pero auténticas, con duchas comunes y agua caliente. Cada noche actúan músicos y bailarines, y se puede disfrutar de tej o borde (una especialidad de la zona) mientras se escucha música. Sin embargo, no hay restaurante, excepto para el té y la tortilla del desayuno, de modo que es preciso pedir las comidas con antelación. Este lugar es la sede de una cooperativa de veintiocho tejedores, lo que representa una buena oportunidad para crear recuerdos inolvidables e intercambios culturales. Detrás hay una casa familiar que comprende el edificio principal con un establo incorporado, la casa antigua, destartalada, utilizada como cocina y la pequeña tchaboul bet (pequeña casa reservada tres meses para los recién casados). También hay telares y plantaciones de ensetes. Se venden bonitas bufandas de todo tipo, así como pequeños objetos de artesanía local, desde cucharas de cuerno hasta pequeñas liras de seis cuerdas.

Visita guiada. Para los no residentes, existe la posibilidad de una visita guiada a la granja familiar con Makonnen, que habla muy buen inglés y da explicaciones muy detalladas. También es un acompañante ideal en los mercados de Chencha y Dorze, entre los más interesantes de Etiopía por sus tejidos.

Este organismo de formación para el desarrollo ofrece una posibilidad de alojamiento en el corazón del pueblo de Yirgalem.

Es la antigua residencia imperial de Haile Selassie, que se transformó en el hotel gubernamental Wondo Genet Resort, pero que tras revenderse se convirtió en un hotel privado. Está muy desfasado en cuanto a equipamiento, pero tiene mucho encanto porque ofrece una decoración setentera digna de película y habitaciones decentes con una vista maravillosa del lago Awasa. Es mejor evitar ir los fines de semana debido a la cantidad de visitantes, que perjudica la tranquilidad del lugar y los precios. Además del restaurante de estilo soviético, un snack bar que no siempre está abierto ofrece platos sencillos dentro del complejo termal.

Konso Korebta Lodge es un hotel situado en Konso. Se encuentra en la carretera de Jinka, cerca del Museo de Konso y de la colina de Konso. El hotel ofrece habitaciones de gama media y un restaurante. También se ofrecen actividades para niños. El aeropuerto de Arba Mintch está a unos 80 km del hotel. Entre los lugares de interés cercanos se encuentran El Sod, a sólo 6 minutos del hotel, y el pueblo de Mursi, a 20 minutos.

Uno de los hoteles más modernos de Shashemene en la banda de precios bajos, decorado con mobiliario local pero que cuenta con baños con agua caliente y un confort aceptable, sobre todo en relación al precio. La limpieza y el desayuno son correctos, tiene wifi y aunque las camas son un poco duras, su punto fuerte es su bonito y agradable jardín, con palmeras altas, monos y pájaros como visitantes. Por la noche ponen música alta en el bar, frecuentado por los lugareños y donde se respira un buen ambiente.

El único alojamiento asequible en el parque nacional es este conjunto de 8 cabañas comunitarias administradas por una familia en Rira (6 km antes del albergue). Muy auténticas, perfectas para vivir aislado del mundo, estas cabañas de bambú de 3 a 4 camas son muy rudimentarias teniendo en cuenta las dificultades de acceso y las condiciones extremas de vida en las montañas, como en todos los macizos etíopes. De modo que hay un sanitario con agua fría y sin electricidad, y la limpieza de las instalaciones es cuestionable, como en todos los refugios de la aldea, así que es mejor llevar un saco para dormir. Ofrecen comida bajo demanda, aunque es mejor ir bien cargado de provisiones, puesto que conseguir comida en la zona es un calvario. Desayuno con pan casero y miel local. Restaurante de especialidades etíopes.

Esperábamos con impaciencia la construcción de un nuevo hotel pequeño, sin pretensiones, de "estilo chinofrique", como los que hay por todo el país. Y ya está aquí. Siko Mendo es un edificio muy reciente de dos plantas, la mejor opción de la región para alojarse al pie del macizo de Bale con un presupuesto ajustado sin renunciar a la comodidad. Dispone de 30 habitaciones modernas y acogedoras, relativamente baratas en comparación con los albergues de montaña, con baño privado y agua caliente. También cuenta con un buen restaurante vegetariano etíope.

El mejor alojamiento de Awasa para presupuestos reducidos; en primer lugar porque está muy cerca del lago, lo que es raro a este precio, y también porque la casa solo tiene 6 habitaciones dobles y 2 habitaciones familiares, muy sencillas, equipadas con mosquiteras y baño privado con agua caliente, pero aceptables por el precio y bien cuidadas. El desayuno también es excepcional, con tortitas y zumos frescos. Por último, Zebra Guesthouse está dirigido por una pareja etio-belga muy simpática que vive allí, y la relación con ellos es mucho más rica que en un hotel clásico. Ofrecen muy buenos consejos para excursiones por el lago, sobre todo para visitar el valle del Omo. Incluso tienen una agencia receptiva que puede organizar viajes al sur, especialmente porque Wonde es de Arba Minch. Tiene wifi y se encuentra cerca de los bares; lo que lo hace ideal para salir a tomar una copa por la noche.

Otra buena opción de un hotel nuevo orientado a personas de negocios, pero a 300 m del lago. Ofrece amplias habitaciones a precios asequibles, con bonitos suelos y muy bien equipado con wifi, televisión, teléfono, camas grandes y baños privados. Las habitaciones más caras tienen ventanales y un balcón con vistas a la vegetación y al lago. El hotel es un poco más viejo que sus competidores y está más lejos del lago, pero sigue siendo una excelente opción en caso de que haya mucha gente, como sucede los fines de semana.

Este edificio de reciente construcción es el mejor hotel de la ciudad y a precios razonables, teniendo en cuenta los servicios que ofrece: habitaciones cómodas e impecables, baño privado con agua caliente, wifi y desayuno. El restaurante también es una apuesta segura y hay un cajero automático en el vestíbulo. No vale la pena probar las habitaciones más pequeñas para ahorrase 5 $ entre 2 personas: la comodidad y limpieza son más escasas.

El hotel más esperado de Arba Minch, el Haile Resort, inauguró en 2018 el gran complejo hotelero de lujo que faltaba en esta ciudad. Un lugar de referencia para los turistas en el camino hacia Konso y el valle del Omo. Este complejo de 107 habitaciones cuenta con un edificio de tres alas sobre la ciudad y frente al bosque. Goza de magníficas vistas desde las habitaciones y el bar-restaurante y resulta muy chic con su terraza exterior arbolada. Piscina, spa con hammam, sauna y masaje, habitaciones con el equipamiento más moderno, televisión, aire acondicionado, wifi rápido, apartamentos familiares o con salón... tiene de todo.

El Hotel New Yorker es un majestuoso establecimiento que data de 1929. Su edificio Art Déco ofrece impresionantes vistas al río Hudson y está a solo 12 minutos a pie del Empire State Building. Las habitaciones son informales y disponen de conexión Wi-Fi gratuita y TV de pantalla plana. Algunas ofrecen vistas a la ciudad o al Empire State Building. El hotel también cuenta con 3 restaurantes, un gimnasio y salas de reuniones. Se ofrece desayuno por un suplemento y servicio de aparcacoches. La ubicación del hotel es ideal para compradores, turistas y amantes de la vida nocturna, con muchos restaurantes, bares y atracciones en las inmediaciones. Tanto si se trata de un viaje de negocios como de una escapada romántica, el Hotel New Yorker ofrece una excelente relación calidad-precio en un entorno emblemático de Nueva York.