INHOTIM
Un parque enorme con tres circuitos, uno rosa, uno amarillo y uno naranja, para todos los bolsillos.
La visita se organiza en torno a tres circuitos, uno rosa, otro amarillo y otro naranja, cada uno de los cuales comprende una decena de edificios repartidos por este inmenso parque. Entre estos edificios, los senderos serpentean por un magnífico jardín botánico salpicado de lagos y obras de arte (a menudo estatuas) al aire libre. Es un paseo magnífico.
Como en todos los museos de arte contemporáneo, algunas de las salas presentan obras que pueden parecer demasiado conceptuales... Algunas salas son de visita obligada, pero todas son interesantes.
La oficina del parque es moderna y agradable, y la cola es muy corta entre semana. También hay una tienda de recuerdos al lado. Si tiene un presupuesto ajustado, puede visitarlo los miércoles: es gratis. Los fines de semana, los precios son más altos y hay mucha gente.
Transporte local. En el parque, un trenecito puede llevarle a los distintos edificios de los tres circuitos de Inhotim. La verdad es que no es muy útil, es bastante caro y hay que esperar. En realidad, las distancias entre las salas de exposición son bastante cortas y, sobre todo, el paseo por el parque es muy agradable, salpicado de estatuas y obras de arte que contemplar a lo largo del recorrido.
Consejo. Lleve unas buenas zapatillas de deporte, agua, crema solar, sombrero y repelente de mosquitos, y estará bien equipado para un día de paseo tranquilo. Si puede, lleve bocadillos, ya que a la hora de comer se forman colas desalentadoras en los puestos de comida.