POLIN - MUSEO DE LA HISTORIA DE LOS JUDÍOS POLACOS
Situado simbólicamente en el corazón del antiguo barrio judío, este museo es comparable en tamaño e importancia histórica y cultural al Yad Vashem de Jerusalén. Su inauguración, en octubre de 2014, por los presidentes polaco e israelí, fue un acontecimiento colosal para Polonia, que se reencuentra así con una página importante de su historia: la que traza los vínculos entre polacos y judíos, desde la Edad Media hasta la tragedia de la Shoah. Diseñado por el arquitecto finlandés Rainer Mahlamaki, el edificio es uno de los más bellos de Varsovia. Presenta varios elementos simbólicos, entre ellos una gran brecha que evoca el paso de los judíos por el Mar Rojo. Su fachada está cubierta de paneles de cristal con letras hebreas y latinas que forman la palabra Polin, que en hebreo significa "Polonia", pero también "Aquí descansarás" Perseguidos por toda Europa en la Edad Media, los judíos que llegaron a estas tierras interpretaron esta palabra como un buen augurio que les animó a establecerse aquí. Desde el siglo XVI hasta finales del XVIII, Polonia fue un excepcional remanso de tolerancia que acogió hasta el 80% de la población judía mundial. La exposición permanente es extraordinariamente rica. Ocupa una superficie de más de 4.200m2, es interactiva y cuenta la historia de la mayor comunidad judía del mundo, desde el año 1000 hasta nuestros días, incluyendo sus aspectos más dramáticos, como el antisemitismo de la sociedad polaca, los pogromos y la Shoah. Pantallas táctiles, películas, reproducciones, fotografías, documentos de archivo, testimonios y espectaculares reconstrucciones, como la cúpula policromada de la sinagoga de Gwozdziec, hacen que la narración cronológica sea dinámica, cautivadora y absolutamente conmovedora. Organizado en 8 secciones, el recorrido rastrea el asentamiento y el desarrollo de los judíos en la Polonia medieval gracias a una legislación que garantizaba la libertad de culto y la autonomía, y después examina la vida judía en el país entre los siglos XVIy XVIII, así como el auge del antisemitismo que, de 1772 a 1914, se exacerbó bajo el dominio ruso. A continuación, descubrimos la inmensa riqueza de la cultura judía en Varsovia a principios del siglo XX, borrada por los nazis (que exterminaron a 3 millones de judíos polacos) y por el régimen comunista de posguerra. El museo organiza exposiciones temporales, conferencias y talleres, y alberga también un magnífico restaurante.
Ce musée constitue un véritable symbole, pour leur rendre hommage et raconte leur histoire, au travers d'une exposition répartie sur 8 salles.
Quel que doit notre âge, on ne peut y rester insensible.
A visiter, et ce que l'entrée y est peu chère.