CASTILLO DE NÁMĚŠŤ NAD OSLAVOU (ZÁMEK)
El castillo actual, que domina la ciudad y se eleva majestuosamente sobre este armonioso paisaje de colinas, fue construido en el emplazamiento de un fuerte gótico de principios del siglo XIII. Lo único que queda de esta última es una torre de defensa cilíndrica. Su aspecto renacentista es el resultado de las reformas realizadas por la familia Žerotín entre 1565 y 1568. Posteriormente se añadieron otros elementos arquitectónicos, sobre todo barrocos, durante el periodo de Haugwitz. Admire las bóvedas ricamente decoradas de la biblioteca, que alberga 16.000 volúmenes, incluido un tesoro checo, la famosa Biblia de Kralice. Se trata de una traducción checa del Antiguo y del Nuevo Testamento y la única que se tradujo directamente del hebreo y no del latín como en las traducciones anteriores. Por ello, esta Biblia se considera el origen del checo moderno. Fue elaborado por los protestantes husitas a finales del siglo XVI y principios del XVII. Fue impreso en secreto por la Unión de Hermanos Moravos en la aldea de Kralice nad Oslavou, a pocos pasos. Otra curiosidad es el estudio del presidente Edvard Beneš, que tras la ocupación nazi en 1945 nacionalizó el castillo como su residencia de verano. El castillo dejó de ser propiedad de la familia Haugwitz, y la segunda planta fue ampliamente remodelada para albergar los apartamentos y el estudio del presidente, que no se quedaba mucho allí.