EL MUSEO WIGNACOURT
Se trata de uno de los lugares más espectaculares de Rabat Mdina, poco conocido.
Las catacumbas y la gruta. El punto culminante de la visita es la gruta donde se dice que se refugió San Pablo cuando llegó a Malta en el año 60 d.C., ¡el origen de la comunidad cristiana en la isla! El propio Papa Juan Pablo II vino a visitar su estatua aquí. Para aumentar el mito, se puede acceder a la gruta a través de las catacumbas adyacentes. En medio de estrechos caminos laberínticos, se suceden tumbas de todos los tamaños excavadas en la roca, algunas con fragmentos óseos de las épocas púnica (cartaginesa), romana y cristiana. Por el camino, descubrirá los refugios antiaéreos donde vivieron muchas familias maltesas durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial. Se recomienda a los visitantes ansiosos y claustrofóbicos que se abstengan.
El museo. La visita es muy completa, ya que esta entrada también da acceso al museo de arte religioso, bastante vasto y accesible, situado en el palacio barroco del gran maestro Aloph de Wignacourt (1601-1622). Tan oscuro y sangriento como el Museo de Bellas Artes de La Valeta (San Pablo decapitado o Santa Águeda con los pechos cortados, los dos clásicos de la isla), podrá admirar lienzos religiosos pintados principalmente por Mattia Preti, Francesco y Antoine de Favray.